Nicolás Maduro expresó este sábado que la decisión del gobierno de Estados Unidos de revocar la licencia que permitía a la petrolera Chevron operar en el país afectó los vuelos de deportación de migrantes venezolanos.
“Ahora tenemos un problemita ahí, porque con eso que ellos hicieron han dañado las comunicaciones que habíamos abierto, y a mí me interesaban las comunicaciones que habíamos abierto, porque yo me quería traer a todos los venezolanos que tienen presos y perseguidos injustamente solo por ser migrantes”, dijo Maduro durante un acto por el Día Internacional de la Mujer.
Aseveró que la medida tomada por la administración de Donald Trump “afectó los viajes” que Venezuela tenía programados con aviones de la aerolínea estatal Conviasa para repatriar a los migrantes.
“El imperialismo tomó unas decisiones y se dio un tiro en el pie ellos mismos, sancionaron a una empresa estadounidense, Chevron, que tiene 100 años aquí trabajando”, agregó Maduro.
Resaltó que él no tiene inconvenientes con la presencia de Chevron en el país y extendió una invitación a “todo el que quiera” invertir en Venezuela.
Este viernes, The Wall Street Journal, citando fuentes cercanas al asunto, informó que la administración de Nicolás Maduro comunicó en privado al gobierno de Trump que no recibiría más a los connacionales que sean deportados desde la nación norteamericana.
En febrero, EE. UU. deportó a 366 venezolanos en tres vuelos, mientras que otro vuelo con 242 migrantes llegó a Caracas desde México el 24 de febrero, como parte de un acuerdo con el gobierno mexicano.
Fuente: EFE.
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