La ciudad del sol amada se prepara para conmemorar un siglo de la llegada de los Hermanos Maristas a Venezuela y los 100 años de su primera gran obra educativa en el país, con el Colegio Nuestra Señora de Chiquinquirá, emblema de formación, fe y servicio en Maracaibo.
Desde 1925, los Maristas han dejado una huella profunda en la educación venezolana, inspirados por el carisma de San Marcelino Champagnat y bajo la guía de la Virgen María. En tierra zuliana sembraron una semilla de esperanza que ha florecido en miles de jóvenes formados con valores de fraternidad, compromiso y fe.
El Colegio Nuestra Señora de Chiquinquirá, más que una institución, es considerado por generaciones como un segundo hogar, donde se han forjado ciudadanos íntegros y profesionales comprometidos con el país.
Su lema del centenario, “Amanecer con esperanza”, resume la misión que ha guiado su historia durante 100 años.
“Celebrar estos 100 años es reconocer el compromiso de una familia extendida que abarca a Hermanos, docentes, personal, padres y, especialmente, a nuestros alumnos y exalumnos”, expresó el hermano Dorindo Burgos, director del colegio.
“Cada logro, cada sonrisa, cada huella de servicio que dejan nuestros egresados es la prueba de que el sueño de Champagnat sigue más vivo y relevante que nunca”.
La celebración del centenario se llevará a cabo este domingo 5 de octubre, a partir de las 11.00 de la mañana, con una eucaristía y actividades especiales en las instalaciones del colegio.
Fuente: Prensa Colegio Nuestra Señora de Chiquinquirá.
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