El gobierno chino consideró a Venezuela un "país amigo", y expresó su confianza en que ese pueblo logre "manejar sus asuntos domésticos debidamente, mantener la estabilidad y el desarrollo social y económico"
El Gobierno de China expresó ayer su apoyo a Venezuela, nación de la que se consideró "país amigo", y expresó su confianza en que ese pueblo logre "manejar sus asuntos domésticos debidamente, mantener la estabilidad y el desarrollo social y económico".
En respuesta a los sucesos del jueves, en los que murieron tres personas en enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad, el portavoz chino de Exteriores, Lu Kang, señaló que "China está al tanto de la situación".
"Sabemos que el Gobierno de Venezuela expresó su esperanza de reanudar el diálogo con la oposición", añadió.
El portavoz gubernamental aseguró, en rueda de prensa, que el Gobierno chino considera esa "la línea a seguir para con los intereses fundamentales" del pueblo del país latinoamericano.
El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, urgió ayer a tomar medidas para "reducir la polarización" en Venezuela, a cuya declaración se sumaron los gobiernos de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, México, Paraguay, Perú y Uruguay, que condenaron la violencia de los últimos días.