María Esperanza Morales, nuera de la víctima, relató que el accidente lo provocó su pasajero, quien le ofreció a su suegro algo de comer. Él se volteó para tomar el alimento y no percibió la cercanía de la camioneta y en fracciones de segundo el semáforo cambio, el conductor de la Pick Up se detuvo, pero él continúo hasta estrellarse contra la cabina
Contra una camioneta Pick Up roja chocó Norberto Antonio Bracho, de 57 años, cuando venía del sector El Curarire del municipio La Cañada de Urdaneta de hacer una carrera en su mototaxi.
El motorizado terminó en una fractura craneal y un politraumatismo severo en el Hospital General del Sur. Agonizó por dos semanas y murió ayer a las 10.00 de la mañana.
María Esperanza Morales, nuera de la víctima, relató que el accidente lo provocó su pasajero, quien le ofreció a su suegro algo de comer. Él se volteó para tomar el alimento y no percibió la cercanía de la camioneta y en fracciones de segundo el semáforo cambio, el conductor de la Pick Up se detuvo, pero él continúo hasta estrellarse contra la cabina.
Al momento de producirse la colisión, el cuerpo del pasajero salió expelido de la moto. Mientras que el conductor quedó atrapado entre las ruedas del vehículo. El chofer de la camioneta se bajó, cargó el cuerpo de Norberto y lo sentó.
La víctima estaba inconsciente, ajena a todo lo que sucedía alrededor; al despertar se vio en una camilla del Hospital de La Concepción I con pronóstico reservado. Los días transcurrieron y no mejoraba, al contrario la fractura craneal así como el traumatismo generalizado que sufrió en todo el cuerpo hicieron que su estado se complicara cada vez más. Una vez que los riñones le dejaron de funcionar, los médicos de guardia decidieron remitirlo hasta el Hospital General de Sur, donde murió.
Los familiares de Norberto supieron la noticia a través del conductor de la camioneta que los llamó por teléfono comprometiéndose en ayudarlos a cancelar la mitad de los gastos del funeral y el entierro, comentó Morales en la morgue.