Una vez que los antisociales perpetraron el crimen, la víctima se levantó del pavimento, cubrió sus heridas con las manos para evitar que la sangre continuará brotando, se desangraba, pero esto no impidió que corriera siete cuadras hacia abajo, gritaba por ayuda, nadie lo auxiliaba
Audio José Boscán, de 28 años, caminaba, el pasado viernes a las 5.30 de la tarde, por la calle 47 del barrio Los Arenales del municipio San Francisco; cuando tres sujetos lo interceptaron y sin mediar palabras le asestaron tres puñaladas: una en la clavícula y dos en el pecho, dejándolo casi muerto en plena calle.
Una vez que los antisociales perpetraron el crimen, la víctima se levantó del pavimento, cubrió sus heridas con las manos para evitar que la sangre continuará brotando, se desangraba, pero esto no impidió que corriera siete cuadras hacia abajo, gritaba por ayuda, nadie lo auxiliaba; hasta que en un momento comenzó a desvanecerse, perdió el conocimiento y cayó muerto en el suelo sobre un charco de sangre, así lo relató María Boscán, tía del occiso.
Los familiares de la víctima, no encontraban consuelo afuera de la morgue forense, se abrazaba entre sí, lloraban y gritaban clamando justicia. Con lágrimas en los ojos y la voz entrecortada, María detalló que los delincuentes además de robarle la cartera a su sobrino lo habían golpeado sin piedad.