Hoy el mercado de dispositivos móviles atraviesa por la misma dificultad del resto de los sectores económicos en el país: la falta de dólares
En una odisea se convirtió para el ciudadano la posibilidad de adquirir un equipo celular nuevo y peor aún, repararlo. Los principales agentes autorizados y tiendas muestran estantes vacíos y los pocos que tienen, traídos del extranjero, se comercializan en cifras impensables que oscilan entre los 900 mil y 86 millones de bolívares.
A esto se suma la poca efectividad del actual sistema de asignación vigente (Simadi) para la entrega de dólares que requieren las principales empresas operadoras del país.
José Finol, propietario de una tienda, se quejó porque no hay celulares por ningún lado. “Los equipos que eran baratos se extinguieron de las tiendas, el más sencillo o básico te cuesta hasta 900 mil bolívares y el famoso Samsung Galaxy S8 Plus nuevo cuesta 86 millones 613 mil 360 bolívares. Ahora tener un teléfono es un lujo”.
Dijo que tener unos cinco meses que no les llega mercancía. Tampoco ve la guerra de marcas y modelos de antes. “Ahora son muy pocas y con eso se tiene que conformar los clientes”. Señaló que ahora las tiendas resisten con las ventas de líneas, accesorios, tarjetas de memoria, protectores de pantallas.
Vueltas
Ana Silva, abogada de 30 años, se encontraba en su peregrinar porque su aparato no tiene reparo. “Necesito uno para el trabajo porque no puedo andar incomunicada, pero en las tiendas autorizadas no hay teléfonos disponibles a precios accesibles, los poquitos que vi cuestan un ojo de la cara, casi 40 sueldos mínimos. ¡Qué barbaridad!”.
Los datos reflejan que la mayoría de los aparatos reportan, en los últimos nueves meses, incrementos que van desde el 150 por ciento hasta el 550 por ciento.
Empresarios y minoristas de tiendas acreditadas por las empresas de las tres operadoras del país alegan que las compañías ya no tienen la exclusividad en la importación de equipos. Señalaron que la empresa estatal Telecom Venezuela es la comisionada en la distribución de las divisas y la asignación de los aparatos que estén disponibles.
En las tiendas Movilnet la situación no es muy distinta a las del resto. La cantidad de móviles que se ofrecen al público mermó en los últimos meses y los pocos que llegan se venden como “pan caliente”, por comercializarse a precios muy por debajo del resto de la competencia.
Nelly Romero, vendedora en una sucursal, explicó que “al día ofrecen unas 25 o 30 unidades como máximo, pero es poco para la alta demanda que tienen. En ocasiones tenemos colas de hasta 100 personas que incluso amanecen y se disipan cuando llegan y se enteran no hay celulares para todos”.
Por todos los flancos
El área de la telefonía fija y móvil también siente el golpe en la escasez de divisas. Es una sección que no produce dólares porque los equipos vienen del extranjero y se ofrecen en bolívares. Lo dueños intentaron acudir al Simadi, pero la dinámica para obtener divisas no muestra mejoras en su eficiencia. Sin dólares no hay equipos disponibles y nada que ofrecer a los compradores.
Los representantes de las tiendas indicaron que generalmente los tres últimos meses del año son los de mayores ventas, pero en lo que resta de 2017 la situación es incierta. “Ahora poseemos poco inventario y desconocemos si en noviembre o diciembre llegarán más dispositivos móviles con líneas o liberados”.