La señora Rosa agradeció a través de un vídeo a la fundación Nacho Apoya por construirle una casa. El hermano de Miguel Ignacio Mendoza desde su cuenta de Instagram agradeció la acción
La bondad caracteriza al dúo Chino y Nacho. Pero esta vez el único protagonista es Miguel Ignacio Mendoza “Nacho” con su fundación Nacho Apoya. El joven cantante sacó a flor de piel su capacidad humanitaria y junto a su hermano el ingeniero, Hermito Mendoza le construyó una casa a la señora Rosa y a los 16 miembros de su familia, en el barrio 24 de Marzo de Petare, Caracas.
Con esta acción el cantante enamoró aún más a las millones de personas que lo siguen. Donó sus honorarios de los show llevados a cabo en el Forum de Valencia, con el fin de poder iniciar la construcción de la vivienda que día a día se ve echa una realidad.
Ante este acto de solidaridad la señora Rosa, una mujer de contextura doble, tez morena y cabello corto canoso grabó un pequeño vídeo donde contó a los venezolanos que hace 26 años su casa se quemó y un día vino un cantante “llamado Nacho y me dio el apoyo de hacerme mi casa. ¡Gracias Nacho!… Te quiero mucho, con el corazón en las manos”, expresó la dama con alegría sentada sobre una cama.
Activo con la gente
El interprete de Me Estoy Enamorando fue etiquetado en el vídeo y expresó a través de su cuenta de instagram @nacholacriatura que “quisiera tener el tiempo y los recursos para atender las peticiones diarias de ayuda que le llegan a través de las redes sociales y cartas”, pero son tantos los casos que aseguró ser muy difícil para él, sin el apoyo de un equipo, poder complacer las necesidades de toda su gente en áreas de salud, vivienda, educación y deporte. Prometió que sigue haciendo todo lo posible y que a través de su fundación Nacho Apoya ha tenido la oportunidad de brindar esperanza a deportistas, a personas de salud comprometida y a niños en situación de calle.
Nacho etiquetó a su hermano @HermitoMendoz quien al ver las imágenes comentó en el instagram: “este vídeo que me enviaste de la Sra. Rosa con su testimonio, los planos listos del proyecto, y el equipo en acción, es lo único que necesitamos para saber que estamos cumpliendo con la misión que Dios nos puso, y con el legado de nuestro padre que a tantas personas ayudó. A pesar de no haber contado con nadie en sus últimos días, papi siempre estuvo satisfecho dedicándose a solucionar los problemas de los demás antes que los suyos. La lección más grande que el viejo nos dejó fue dar lo mejor de nosotros sin esperar nada a cambio”.
Mendoza para finalizar su comentario agradeció a su hermano Miguel Ignacio por acompañarlo en este nuevo reto. “Gracias por haber estudiado lo que yo no estudié, gracias por ser mi complemento. Me siento orgulloso de ti. Te amo mucho aunque nunca te lo diga. Esto es simplemente el comienzo. Vamos a generar sonrisas, vamos a cambiar vidas, vamos a hacer que papá se sienta orgulloso de sus hijos. Nuestro jefe contento en el cielo #Venezuela #nachoapoya”.
Antecedentes de su bondad
Miguel Ignacio se ha ganado el amor de los venezolanos. Su talento y generosidad lo han llevado los últimos meses hacia lo más alto de la cima.
El cantante el 6 de julio se topo en el aeropuerto con una dama desconsolada, que sin dudarlo se le acercó y la abrazó. Yadiris Monsalve, trabajadora social afligida le contó que ella junto a su esposo se encontraban en el país de vacaciones y perdieron el vuelo de regreso a Venezuela su país de origen.
Los esposos tenían dos días varados en el aeropuerto, pues por perder el vuelo tenían que pagar una multa de 782 dólares que ninguno tenía. La solución del personal era que la pareja vendiera sus pertenencias o pidieran dinero a otros pasajeros y por eso lloraban sin descanso.
Nacho le aseguró que los ayudaría. Les dijo que lo esperaran un momento para chequear y volvió. Cuando iba a pagar los pasajes de sus “paisanos venezolanos” la aerolínea Santa Bárbara estaba cerrada y sin perder más tiempo le compró unos boletos nuevos en otra la aerolínea.
La pareja ofreció cancelarle en bolívares y este no aceptó. Al final con esta acción de bondad Nacho se ganó miles de besos, abrazos y bendiciones.
26 años atrás se quemó la casa de la señora Rosa que ahora Nacho reconstruye