El zuliano fue castigado por el alto mando de la novena, luego que en su segundo turno al bate -en el que falló con elevado a primera base- reaccionara tirando el bate y llegara al dugout con mala cara
En su primera temporada en las Grandes Ligas, Odúbel Herrera está recibiendo muchas lecciones.
El pasado domingo vivió quizás la más especial del año en el encuentro entre los Filis de Filadelfia y los Bravos de Atlanta, en el Turner Field.
El zuliano fue castigado por el alto mando de la novena, luego que en su segundo turno al bate -en el que falló con elevado a primera base- reaccionara tirando el bate y llegara al dugout con mala cara. Acto seguido, Pete MacKanin, manager interno de los cuáqueros, optó por dejarlo en el banco.
“Los muchachos juegan en las Pequeñas Ligas y los hombres en las Grandes Ligas. Nosotros no vamos a hacer pucheros. No vamos a sentir lástima por nosotros mismos. Si eso quieres, entonces no perteneces aquí. Él tuvo que aprender una lección. Para mí ha estado haciendo pucheros por unos días, así que simplemente quise asegurarme de que reciba en mensaje”, declaró MacKanin en rueda de prensa.
El “Torito” fue víctima de la frustración que siente en un equipo que en ese momento había perdido seis juegos consecutivos y 14 de los últimos 17 compromisos. Además los Filis están a punto de convertirse en perdedores de 100 juegos, por primera vez en 54 años.