La pasión de los fanáticos zulianos por la pelota criolla se hizo sentir, a pesar de la derrota de Águilas, en su estreno en la temporada 2015-2016
Los rostros de alegría y entusiasmo por el regreso del béisbol criollo invadieron anoche su lugar predilecto en Maracaibo: el estadio Luis Aparicio “El Grande”, el territorio sagrado al que llegaron para respaldar en un nuevo debut a las renovadas Águilas del Zulia, que frente a Bravos, iniciaron su camino rumbo al campeonato anhelado desde hace 15 años.
Hombres, mujeres, adolescentes, niños y niñas, solos o en grupos familiares, colmaron las instalaciones del coso marabino, que recibió entre espectáculos musicales y concursos, tanto en el interior como en las adyacencias del parque, a la fiel fanaticada naranja que respaldó con todo a su equipo a pesar de la derrota por la mínima diferencia frente a la novena margariteña.
Como siempre, el colorido y la fiesta se hicieron presentes en las tribunas desde casi 60 minutos antes del arranque del compromiso.
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