El exmagistrado Román Duque Corredor dibuja los escenarios que sorteará la MUD para ejecutar el “cambio” prometido a los electores. Con una victoria contundente la oposición venezolana alcanza el poder en el Parlamento durante la revolución
Comienza la travesía del “cambio” en la Asamblea Nacional. Aun cuando por ahora los 99 diputados no representan una mayoría calificada para la bancada de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en la AN, el analista político Alfredo Keller explica que con la victoria en votos y escaños, “el poder de la AN pasa a manos de la oposición, independientemente del número de diputados”.
El bloque opositor podría aumentar sus puestos en la AN cuando se definan las 22 curules que aún faltan por adjudicar, lo que podría darle a la oposición una mayoría calificada que representa el poder absoluto en la toma de decisiones en el Parlamento.
“Con la mayoría que en este caso (99), tu designas la presidencia de la Asamblea y designas las presidencias de las comisiones”, situación que le permite a la MUD administrar la orden del día y la convocatoria a las sesiones, “es decir, la agenda del parlamento, el tipo de leyes que se van a discutir, cuales leyes se introducen en las comisiones y cuales leyes se sancionan y se aprueban, esa es la prerrogativa de una mayoría en la AN”.
Esta superioridad numérica abre el abanico de posibilidades a una de las propuestas bandera de la oposición, la libertad para los presos políticos. Según el análisis del abogado constitucionalista y exmagistrado, Román Duque Corredor, la coalición opositora tiene hoy los mecanismos para aprobar la propuesta de ley de Amnistía, sin arriesgarse al veto por parte del presidente Nicolás Maduro.
“Una opción importante para la oposición es el referéndum aprobatorio, una ley de amnistía puede ser sometida a consulta previamente para que el pueblo se pronuncie, porque el pueblo siempre tiene derecho a pronunciarse”.
La opción de la consulta popular podría aquietar una posible estrategia presidencial de frenar la amnistía, declarando el proyecto como inconstitucional y solicitando la interpretación de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia. “Cuando el pueblo se pronuncia sobre decisiones sometidas a referéndum el presidente no puede vetarla, muy mal quedaría un presidente al ir en contra de la voluntad popular”, aseguró el experto.
Aclara Duque que está en manos de la oposición, la forma en la que constituirá la propuesta, que “puede ser una amnistía total, una amnistía parcial o transitoria, para los llamados presos políticos”.
Renovación de los poderes
La mayoría alcanzada por la MUD, según los expertos consultados por la Verdad, permite rescatar las tres funcione fundamentales del hemiciclo parlamentario: Legislar, controlar e integrar el resto de los poderes públicos que no son nombrados por elección popular.
En la agenda de la AN, que se despide este 2015 de sus labores parlamentarias, queda como asignatura pendiente el nombramiento de 18 magistrados del TSJ. Aunque hubo convocatoria y se creía que la juramentación de los nuevos integrantes del Poder Judicial se concretaría antes de las elecciones del 6-D, el tema quedó rezagado por la efervescencia de la campaña.
Ahora corresponderá al nuevo periodo 2016-2021 alcanzar un acuerdo político, ya que se necesitan los votos de las dos terceras partes de los diputados (112) para concretar la renovación del TSJ y otras instituciones como el Ministerio Público, la Procuraduría General de la República y la Defensoría del Pueblo.
Caso contrario ocurre con cargos, por ejemplo, como el del presidente del Banco Central de Venezuela, cuyas credenciales deben ser revisadas por la AN y no necesitan una mayoría calificada.
“Se pueden restituir poderes, remover o reestructurar organismos públicos, cambiar funcionarios por otros, establecer determinadas condiciones para ejercer competencias. Una simple mayoría es suficiente para introducir los cambios legislativos que permitan la recuperación de la autonomía parlamentaria”, insiste Duque.
PSUV como minoría
De la interpretación de los resultados electorales de ayer, no puede escapar el hecho de que por primera vez en una década, el mando de la AN abandona el barco del chavismo, hasta el cierre de esta edición con 46 diputados electos. Alfredo Keller prevé una minoría psuvista que desde sus curules “lo que van a tratar es de obstaculizar” los procesos.
“La oposición no va a entrar a buscar a la fracción parlamentaria del PSUV, sino al Poder Ejecutivo y los poderes públicos”, vaticinó el director de la consultora Keller y Asociados. A su juicio, una minoría psuvista lo que hará es “tratar de sabotear el papel de la Asamblea en general, como han hecho cuando ganó (Antonio) Ledezma en la Alcaldía Metropolitana y le montaron una alcaldía paralela o restringir los recursos económicos como le pasa a Eveling Trejo en Maracaibo”.
Advierte que esta derrota al chavismo abre como perspectiva la discusión de grandes conceptos dentro de las filas del partido fundado por el difunto expresidente Hugo Chávez, “alguien tendrá que asumir la derrota y eso naturalmente va a general un potencial conflicto interno dentro del oficialismo”.
A legislar
A pesar de las limitaciones que suponen la obtención de mayoría simple y no calificada, que por el momento tiene la MUD cuando aun están por definir 22 diputaciones, el constitucionalista Duque Corredor aclara que la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela permite realizar cambios profundos en las leyes.
“Con la mayoría simple, sólo podría derogar leyes ordinarias, para las orgánicas también se requiere la mayoría calificada”, recuerda y destaca que con leyes ordinarias se pueden condicionar a los organismos públicos.
“Serían leyes orgánicas que establezcan nuevos requisitos, sin que signifique una derogación y puede sobre todo controlar cómo se están aplicando las leyes orgánicas por los organismos públicos y sus funcionarios”.
¿Revocatorio o constituyente?
“Para ambos procesos se requiere de una mayoría calificada”, destaca el exmagistrado, aunque señala que, en el caso del revocatorio, es un planteamiento que requiere de un estudio profundo por parte de la bancada de la Mesa de la Unidad Democrática.
“El Poder legislativo lo podría hacer hasta con simple mayoría, si le pide al CNE que convoque a un revocatorio, pero lo importante es ver si un revocatorio es la solución, ya que se ha llegado a la mitad del período presidencial y en un revocatorio, de resultar ganador la oposición, asumiría la conducción del país el vicepresidente y eso no sería un cambio político”, argumentó.
En vista de los múltiples escenarios que se vislumbran para Venezuela, a partir de la juramentación de los nuevos diputados el próximo 5 de enero de 2016, Duque resalta como “lo más importante” que el Poder Legislativo tendrá el reto de discutir y lograr el mayor consenso posible para los nombramientos de los poderes públicos, “cosa que en la actualidad no se ve, no se practica. Es necesario también un cambio de mentalidad”.
Rut guerrero. Politóloga.
El pueblo dijo que necesita un poder independiente, quiere que haya alguien que controle, que no se delegue la facultad de legislar en el poder Ejecutivo solamente. A Venezuela le falta debate de ideas y propuesta y ahora están obligados tanto el Ejecutivo como el Legislativo, a sentarse por el bien de Venezuela que pide al Ejecutivo que pronto haga una rectificación a través de unas medidas económicas y sociales. Debería significar este resultado el fin de las leyes habilitantes para el Presidente.
