Los homicidas iban en un carro cuyas características, por ahora se desconocen. Lo interceptaron y desde adentro dispararon en más de 20 ocasiones. La policía científica maneja el crimen como un ajuste de cuentas, pero no descartan el móvil pasional
Helmert Ismanuel Camacho Lucena (17) se despidió de Yasmira Camacho, su madre, el pasado martes a las 7.00 de la noche, antes de irse a la Feria del municipio San Francisco. Le pidió mil bolívares a su progenitora para ir a la celebración y salió en compañía de su hermano menor y un grupo de amigos. Ayer, a la 3.30 de la mañana, Yasmira Camacho recibió la noticia de que su hijo lo asesinaron en el sector Bolivariano del barrio El Manzanillo, donde también residía.
La noche festiva en la ciudad sureña culminó para Camacho cuando se dirigía a su hogar. Su hermano prefirió adelantarse a casa con sus amigos, pero él decidió irse más tarde con sus compañeros y con una joven, a quien tenía abrazada durante el regreso. A pocos metros de su vivienda, un vehículo interceptó a la pareja. Un hombre sacó una pistola, calibre 9 milímetros, por una de las ventanas del auto y le disparó al muchacho.
A pesar de la algarabía y la música en las viviendas del sector, se escucharon múltiples detonaciones en la zona. Los disparos dispersaron a los vecinos quienes se habían reunido para improvisar una especie de amanecer en la cuadra. En ese momento el homicida y sus cómplices emprendieron la huida en el carro que dejaba detrás de sí una estela de humo producida por el roce entre el asfalto y los cauchos.
La mujer contó que al llegar al sitio, el cuerpo de su familiar yacía sobre el pavimento con 32 disparos distribuidos en la espalda. "Mi otro hijo acababa de llegar a la casa y a los minutos escuchamos los tiros. Salimos corriendo y un amigo me dijo que habían matado a Helmert". Entre lágrimas contó que los amigos que estaban con Camacho dejaron solo el cuerpo en el sitio.
Trascendió que la chica que llevaba abrazada el joven está casada y tienes tres hijos. Las autoridades policiales investigan la causa del asesinato y manejan el crimen pasional como posible móvil del suceso, aunque se conoció que Camacho estaba involucrado en el mercado de las drogas, por lo que también se estudia un ajuste de cuentas.
Helmert Camacho estudiaba cuarto año de bachillerato y era el tercero de cuatro hermanos. No estaba casado ni tenía hijos.
32 heridas de bala acabaron con la vida del joven