El slugger venezolano regresó ayer al lineup de los Tigres de Detroit y disparó un hit en cuatro turnos, pero tuvo que salir nuevamente del juego por precaución. Cabrera ya estuvo fuera de acción tres días, descansando el bíceps izquierdo, tras salir del compromiso dominical con dolor en el brazo.
El slugger venezolano Miguel Cabrera regresó ayer al lineup de los Tigres de Detroit y disparó un hit en cuatro turnos, pero tuvo que salir nuevamente del encuentro, esta vez tras sentir una molestia en la corva de la pierna derecha.
De acuerdo con el reporte de la agencia de noticias The Associated Press, se trata de una distensión en la parte trasera de la rodilla, aunque no se informó de inmediato el grado de la lesión y si esta volverá a costarle tiempo de juego al aragüeño.
Cabrera estuvo fuera tres días, descansando el bíceps izquierdo, tras salir del compromiso dominical con dolor en el brazo.
El manager Ron Gardenhire, quien estuvo hablado de usarlo solamente cuando esté libre de molestias, para sacarle el cuerpo a un problema mayor, le dio entrada en el lineup como designado, en lugar de Víctor Martínez.
El problema sucedió cuando Cabrera corrió de primera a segunda ante una conexión de Nicholas Castellanos. Fue atendido en el terreno y sustituido de inmediato.
Miguel Cabrera está completando un destacado inicio de temporada en términos ofensivos, pues es el líder de los bengalíes en promedio (.323) y en carreras remolcadas (21).
Es así como Cabrera, ya con 35 años, está dando señales del progreso que se proyectaba para este campeonato, pues viene de la peor temporada de su carrera, una en la que se perdió más juegos (32) que los jonrones que dio (16).
De hecho, empezó la campaña con unos Tigres en reconstrucción por primera vez desde el 2007, su última zafra con los Marlins. Y los US$192 millones que se le deben al venezolano hasta el 2023 hicieron que su contrato fuese inamovible durante esta reciente temporada muerta.
Cabrera no se ofende cuando se le pregunta por esos seis años restantes. Por momentos sonríe, como recordándote que su contrato le garantiza que seguirá teniendo la oportunidad de jugar el deporte que ama. Pero también toma un tono más serio, dejando en claro su lealtad hacia los Tigres y el orgullo que siente por saber que está haciendo todo lo posible por cumplir con su parte del contrato.