Luis Alberto Márquez Paz (18) emprendió un viaje sin retorno. Salió a pescar cangrejos a orillas del Lago de Maracaibo en compañía de unos familiares y una descarga eléctrica lo mató.
Los relámpagos iluminaban el cielo, Luis Alberto Márquez Paz, de 18 años, disfrutaba del paisaje sin imaginar lo que sucedería minutos después. Un rayo impacto en su cabeza, perdió el equilibrio, cayó de la embarcación donde se encontraba en aguas del Lago de Maracaibo.
Los detectives del Eje de Homicidios de la Policía científica comentaron que la víctima salió de su casa en compañía de uno de sus hermanos y un primo, todos acostumbraban a pescar cangrejos en Puerto Paz. Aquella mañana hacía frio, había tiempo de lluvia, a pesar de las circunstancias subieron a la lancha, “debían buscar el sustento para mantener a sus familias”.
La aparente calma y el silenció que imperaba en el estuario se vio interrumpida por los truenos, continuaron la faena, esperaban que lloviera en cualquier momento, de pronto un resplandor azul, blanco y amarillo los sorprendió, el muchacho recibió una descarga eléctrica, murió al instante.
En media hora la Guardia Costera llegó para remolcar el cadáver, las comisiones policiales en conjunto con el equipo de experticias y los funerarios se encargaron de subirlo a la furgoneta con destino a la morgue forense.