Los venezolanos andamos a la deriva, no solo deambulando en la más dramática de las diásporas de la región, sino internamente en el país; quien trabaja por un salario está condenado al hambre, incursionar en un emprendimiento es casi imposible
El que después de casi 20 años de Socialismo del siglo XXI la propuesta electoral sea una caja de comida mensual por familia, bonos con los que no se puede comprar ni un cartón de huevos y la promesa de “ahora sí arreglaremos la economía pero si Maduro es reelecto” refleja la grotesca elementarización de nuestra política, lo hemos dicho, nuestra política hace tiempo dejó de ser una herramienta para la calidad de vida, la convertimos en un vulgar entretenimiento, donde el Gobierno es el cirquero.
Del lado opositor la tragicomedia también impera, factores políticos divididos, enfrentados y neutralizados por las instituciones rojas rojitas completa el show… los venezolanos andamos a la deriva, no solo deambulando en la más dramática de las diásporas de la región, sino internamente en el país; quien trabaja por un salario está condenado al hambre, incursionar en un emprendimiento es casi imposible, no hay materia prima ni productos y las intencionales trabas burocráticas son insorteables, quedando espacio solo para el bachaqueo, el vivir de las remesas y, ahora si, del “Dios proveerá”.
Queremos ser claros y transparentes, el 20-M, al igual que la “constituyente”, regionales y municipales, solo servirá para engrosar el expediente antidemocrático del Gobierno, no será una fecha mágica, no habrá un marcado “antes y después” todo seguirá empeorando cada vez más aprisa, insistimos, aún ganando un candidato distinto a Maduro el chavismo con su ANC y demás instituciones partidizadas lo inutilizarán, al igual hicieron con el Parlamento de la República, gobernaciones y alcaldías que el pueblo les ha quitado vía electoral, lo despojarán de competencias, facultades, recursos y las atribuciones más relevantes ¡No hay que ser politólogo ni muy acucioso en la política para predecirlo!
¿Qué nos queda? A los venezolanos nos queda lo único que no hemos hecho en estos luengos 20 años ¡Unirnos! dejar de ser borregos partidistas, ganado electoral, idólatras de gobernantes autoengradecidos; los venezolanos debemos anteponer nuestro gentilicio, antes de ser autómatas chavistas u opositores, e incluso “independientes”, debemos ser venezolanos, ser barquisimetanos, maracuchos, caraqueños, trujillanos, valencianos, apureños ¡Ciudadanos! exigentes de calidad de vida en nuestras ciudades, estados y país.
Afrontémoslo, en esta Venezuela la fórmula es unión entre los venezolanos y la imprescindible mediación de la diplomacia internacional, el chavismo se encuentra frenéticamente atornillado al poder, solo esa unión los hará encarar su fracaso.