Además de Cabello, el Departamento del Tesoro incluyó en su lista de delincuentes internacionales a su hermano, José David Cabello Rondón; a su esposa, la ministra de Turismo, Marleny Josefina Contreras Hernández; y a Rafael Alfredo Sarria Díaz
El Tesoro de EEUU anunció ayer sanciones económicas contra el dirigente chavista, Diosdado Cabello, y su entorno dentro de la campaña de presión contra el Gobierno de Nicolás Maduro, a dos días de las elecciones presidenciales en Venezuela.
Además de Cabello, EEUU incluyó en su lista de delincuentes internacionales a su hermano, José David Cabello Rondón, director del Seniat; a su esposa, la ministra de Turismo, Marleny Josefina Contreras Hernández; y a Rafael Alfredo Sarria Díaz, un empresario ligado a Cabello.
Cabello, de 55 años, es el primer vicepresidente del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y fue presidente de la Asamblea Nacional entre 2012 y 2016.
Como consecuencia de estas medidas, quedan congelados los activos que estas personas tengan bajo jurisdicción estadounidense y se prohíbe a entidades estadounidenses llevar a cabo operaciones financieras con ellos.
También son objetos de sanciones económicas tres empresas con sede en Boca Ratón, Florida, indicó el Tesoro estadounidense.
Las compañías sancionadas por la Oficina de Control de Activos Extranjeros de Estados Unidos del Departamento del Tesoro fueron mencionadas como 11420 Corp, Noor Plantation Investments LLC y SAI Advisors Inc. Las tres son vinculadas al empresario Rafael Alfredo Sarria Díaz, a quien le vinculan con Diosdado Cabello.
El Gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, ha impuesto en los últimos meses varias rondas de sanciones económicas contra altos cargos y funcionarios del gobierno de Caracas, incluido el propio presidente Maduro, por abusos de derechos humanos, corrupción y acciones para minar la democracia.
Las sanciones se imponen a dos días de que Venezuela celebre este domingo unas elecciones presidenciales en las que el oficialista Nicolás Maduro es el favorito, han sido ampliamente criticadas por la comunidad internacional y que EEUU ha calificado como "ilegítimas".