Los venezolanos queremos un cambio. Debemos seguir luchando unidos para rescatar la democracia, para reestablecer el hilo constitucional. El noble pueblo de Venezuela es paciente pero no es pendejo
Los venezolanos queremos vivir bien. Queremos calidad de vida, servicios públicos, oportunidades de estudio, de trabajo y de emprendimiento. Queremos tener cubiertas nuestras necesidades de alimentación, protección de la salud, seguridad. Y para lograr eso, necesitamos recuperar el aparato productivo, producir en Venezuela lo que aquí consumimos.
Necesitamos rescatar el valor de la moneda, recuperar el salario para que sea suficiente. Tenemos derecho a soñar una Venezuela productiva, con instituciones que funcionen, una Venezuela de progreso, de bienestar, de justicia y libertad. Tenemos la obligación de rescatar la democracia en nuestro país.
Si queremos lograr todo eso, los venezolanos tenemos que unirnos para sacar democráticamente al mayor responsable de esta crisis y de la humillación que sufre el pueblo venezolano: Nicolás Maduro. Nosotros no queremos ni vamos a participar en un proceso sin condiciones y hemos tomado la decisión de luchar porque se den esas condiciones, necesarias para que el pueblo sienta la confianza de que su voto será respetado.
Repetimos las básicas para que no sufran de un innecesario olvido: conformación de un CNE equilibrado; revisión del REP e inscripción de nuevos votantes y reubicación –sin condicionar su legalidad en esos países– de los que se han ido al exterior; modificación de la fecha pero con la posibilidad de que se pueda cumplir un cronograma que incluya la realización de primarias como lo establece la Constitución; Observación internacional con todas las de la ley; restitución de la habilitación de partidos y dirigentes políticos; igualdad de oportunidades en todas las fases de la campaña electoral; cese del grosero ventajismo y de la presión al elector a través de puntos rojos, cajas de alimentos, bonos y voto asistido, entre otras.
El noble pueblo de Venezuela es paciente pero no es pendejo. Se equivocan quienes lo subestiman. Porque los venezolanos queremos un cambio. Debemos seguir luchando unidos para rescatar la democracia, para reestablecer el hilo constitucional y para recuperar las instituciones secuestradas por un grupo de irresponsables ilegitimados.
Los venezolanos queremos un cambio y queremos elegir a quien lo conduzca. Un acuerdo entre Falcón y el Gobierno es un acuerdo que no representa ni a la mayoría del país, ni a la oposición, ni a la unidad democrática ni a nadie. Es una especie de “auto acuerdo” que nada tiene que ver con ese anhelo de cambio que tenemos los ciudadanos de nuestra patria. Así que seguimos luchando unidos por condiciones para, con votos, lograr ese cambio.