
Insistió en que la articulación opositora es una tarea pendiente y ya no depende de una negociación, “sino del surgimiento de una propuesta (algo o alguien) que alinee a su alrededor
“Los cambios políticos (de las concentraciones de poder a las democracias) no se producen por crisis económica sino política y social. Exigen, entonces, liderazgo creíble y fresco, articulación opositora y acción. Tres vacíos que, en Venezuela, paran los pelos”, aseguró Luis Vicente León, analista político y presidente de Datanálisis.
Indicó que es vital que existan líderes que generen confianza y esperanza de cambio, que asuman las responsabilidades y provoquen la unidad a su alrededor.
“No hay que ser muy perspicaz para entender que los liderazgos opositores, con sus virtudes, esfuerzos, sacrificios, aciertos, errores, conflictos, contradicciones y desaciertos, están desgastados y no generan la confianza y motivación para mover a la población a presionar el cambio”, dijo León en su cuenta de Twitter, en la que difundió ayer una serie de mensajes sobre el accionar de la oposición para lograr un cambio de gobierno en el país.
Insistió en que la articulación opositora es una tarea pendiente y ya no depende de una negociación, “sino del surgimiento de una propuesta (algo o alguien) que alinee a su alrededor y se eleve respecto a sus contrincantes a tal nivel que quien no la siga se queda como la guayabera: por fuera”.
Concluyó en que no hay cambio sin que la gente no participe y actúe en la defensa de sus derechos constitucionales y humanos. “La comunidad internacional es una ayuda pero nunca un sustituto de la participación política interna”.