El productor, escritor, gaitero y actor, Moncho Martínez, cuenta su experiencia al verse obligado a reinventarse tras la salida del aire del programa Qué Locura
Todos los domingos a las 10 de la noche, los venezolanos disfrutaban de personajes icónicos en el humor como el Inspector Rodríguez, Hermo, Manuel Morejón y más, todos protagonizados y creados por el zuliano, Luis “Moncho” Martínez.
Cientos de estrellas venezolanas e internacionales desfilaron en las pantallas de Venevisión, en el programa de cámara escondida, Qué Locura, siendo víctimas de las ocurrencias del “abusadorcito” del Inspector Rodríguez, quien en una oportunidad, hasta disparos le propiciaron (el fallecido actor, Yannis Chimaras).
Para Martínez, su salida del canal de la colina no fue fácil, y en una entrevista con el diario La Verdad, contó su experiencia, además de las emociones encontradas en cada show que ofrece en el exterior, donde cientos de venezolanos se identifican con sus personajes y ocurrencias.
¿La situación país te impulsó al exterior?
- El éxodo de venezolano quizás me ayudó un poco, pero yo vengo trabajando desde el 2001 con Qué Locura, pero como no existían las redes sociales y la gente no se enteraba. Se me abrieron otras oportunidades, por ejemplo, en Panamá y República Dominicana asesoro a un canal de humor y eso me mantiene viajando constantemente. Yo soy un porfiao en quedarme en mi país.
El año pasado trabajé hasta el 30 de diciembre sin parar, por lo que me tomé un receso. Estuve nueve meses ofreciendo shows en Latinoamérica, en siete u ocho países y en Estados Unidos visité 18 ciudades, pero aquí estoy de nuevo.
¿Cómo se mantiene vigente Moncho Martínez?
- Con la mayor modestia, los grandes talentos de la comedia me respetan… Marko Música, un joven con una carrera prometedora, me dijo ‘Moncho, admiro cómo te reinventáis siempre. Sois un fenómeno’.
Simplemente tenemos que hablar el idioma de las personas hoy en día. Cuando se me cerró la ventana de la televisión, me pregunté cómo le llego a la gente. Así que, saqué a relucir mis personajes más consagrados para reinventarme en Instagram. Hablar el idioma del venezolano le gusta a la gente.
¿Cómo mantienes el ritmo en las redes sociales?
- A veces me complico porque estoy de gira, para eso tengo que sentarme con mi equipo para estructurar un sketch, aunque soy muy de improvisar. De repente se me presenta la situación y la grabo. Yo mismo me grabo, edito, musicalizo y lo subo a las redes.
¿La salida de Venevisión marcó tu vida?
- Un día me dijeron ‘el programa no va más’. Yo no sabía qué hacer… yo decía ‘Dios mío, ¿cómo le digo a mi familia que ya no tengo trabajo?’. Fue entonces cuando decidí tomar las redes y me reinventé. Trabajé más en presentaciones en vivo y bueno… perdí mi zona de confort, que era Venevisión. Me dijeron ‘bienvenido a Qué Locura a mí’ (risas).
¿Piensas volver a la televisión?
- Claro, hay proyectos por ahí… me hicieron ofertas en Telemundo y Univisión, pero eso es otro tema. Quieren instalarme en Estados Unidos y hacer eso sería perder lo que he ganado, que es mi libertad. Tendría que entregarles mi vida a una cadena otra vez en el buen sentido, y a pesar de que me vayan a pagar una buena cantidad en dólares, mi libertad no tiene precio.
¿Hay oportunidad de negociación?
- Les propuse mi imagen… si quieren puedo asesorar o presentar un programa, ya sea de humor o de cámara escondida, yo puedo hacerlo, no hay problema. Pero meterme en un estudio 24 horas al día, espero no volverlo hacer. Estoy esperando respuestas a ver si les conviene.
¿Volverá Qué Locura?
- Creo que sí… yo espero que sí. Soy más optimista que Oscar D’ León comprando champú (risas).
¿Cuál piensas que fue el éxito de Qué Locura?
- Además del talento y el trabajo duro en cuanto a creatividad, los invitados de lujo. Eso llevó el programa al éxito. Afuera se hizo muy popular, aún lo es, por las estrellas que desfilaron en los distintos sketches.
¿Cuáles personajes recuerdan los venezolanos?
- Los clásicos… el Inspector Rodríguez y Hermo son simbólicos. En Richmond, Virginia (USA), en una presentación donde habían como 200 personas, de varias partes del mundo, una señora salió llorando y yo le pregunté ‘qué le pasó’ y emocionada me dijo que cuando escuchó la música de Qué Locura, ‘se le vino el país encima’.
¿Cómo te conectas con tu público?
- En mis shows hablo con todo el mundo, para que me cuenten su experiencia como inmigrantes, porque estoy escribiendo un libro sobre eso. Es un proyecto como… ‘el detrás de Qué Locura’.
¿Que conservan los venezolanos en el exterior?
- Querer volver. Indiferentemente lo que las personas opinan, quieren volver. Yo entendí de qué se trata todo, porque respetando la religión de cada quien, yo soy devoto de la Chinita y creyente ferviente en Dios y esto es una prueba que se nos puso en el camino para que aprendamos a respetar y valorar las cosas no solo cuando las perdamos. Cuando todos sepamos de qué trata ‘la película’ seremos un mejor país.
¿Cuáles son tus raíces?
- Yo soy de San Francisco, pero a los seis años me mudé a Caracas. Soy lo contrario de Daniel Sarcos (risas). Mi papá es de Tucupita, vino con una petrolera, conoció a mi mamá y formaron una familia. Yo venía por temporadas para el Zulia, nunca perdí la idiosincrasia. Comencé a trabajar desde los 15 años con los Morillos, en la gaita comencé a los 19. En la comedia comencé escribiéndole guiones a Guillermo González en ¿Cuánto Vale el Show?.
¿Cuáles eran tus aspiraciones desde pequeño?
- Soñaba con ser bombero… cada vez que pasaba el camión por mi casa, con el perro dálmata, me emocionaba. Luego fui descubriendo poco a poco lo que quería hacer. Estudié para ser profesor de educación física y después me hice publicista y también músico.
¿En qué estás trabajando?
Estoy trabajando el guion de una película. También voy a grabar un programa en Caracas. Quiero aprovechar el talento y el equipo de Venezuela para exportarlo. Aquí hay cosas buenas… tenemos que hacer material para exportar, hay que creer en nosotros, tenemos que reinventarnos con esta crisis y buscar los ‘cochinos verdes’ (dólares).
¿El talento y la creatividad superan cualquier obstáculo?
- Contra la creatividad no puede nadie. Por eso tuvo éxito Qué Locura… el programa costaba dos ‘lochas’ hacerlo y se vendía en ocho países por tres mil dólares… convertimos algo creativo en productivo.
Perfil:
Nombre y Apellido: Luis Ramón Martínez
Nacimiento: Maracaibo, estado Zulia el 14 de agosto del 1965 (52 años)
Ocupación: Actor, gaitero, productor televisivo, guionista, humorista y caricaturista
Año debut: 1986