Adrián Simancas, joven venezolano que navegaba en kayak en el estrecho de Magallanes, en Chile, y fue “tragado y escupido” por una ballena jorobada, confesó que en ese momento pensó “que había muerto”.
El hecho ocurrió el pasado sábado 8 de febrero y fue capturado en un video que se viralizó en redes sociales, hecho por su padre, el anestesiólogo Dell Simancas, de 49 años, mientras practicaba piragüismo en la bahía El Águila cuando, de repente, el animal atacó a su hijo y desapareció por unos segundos antes de reaparecer sobre la superficie del agua.
“Quisimos atravesar remando la bahía El Águila, teníamos el tiempo a nuestro favor y estaba siendo eficiente la remada, pero de repente el clima se puso feo y ahí mi papá preparó la cámara”, dijo el joven a un noticiero chileno.
Contó que sintió un choque fuerte y pensó que se trataba de una ola antes de darse cuando de lo que realmente ocurría.
“Ahí yo siento que algo me choca por atrás, pensé que era una ola, pero era demasiado fuerte y cuando volteo siento que hay algo carnoso que me roza la cara, que es como de color azul y blanco y que me llega desde arriba y en diagonal y me hunde. Pensé que había muerto, que algo me había comido, que me estaban atacando para devorarme y fueron tres segundos hasta que salí del agua”, detalló el joven, quien aseguró que llevar puesto su chaleco salvavidas fue fundamental para salir a flote.
El estrecho de Magallanes es uno de los principales atractivos turísticos de Punta Arenas, ciudad chilena. Se caracteriza por sus aguas gélidas que son un gran desafío para quienes intentan cruzarlas de distintas formas.
Los ataques de las ballenas directos hacia las personas son poco frecuentes en las costas chilenas.
Fuente: El Nacional
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