Un río de inmundicia corre de nuevo incesantemente por la vereda 1 de la calle 7 del sector 17, que conecta con el estacionamiento del colegio José Enrique Arreaza, en la urbanización San Jacinto, en el norte de Maracaibo.
“Acá estamos de nuevo con esta situación de nunca acabar, el desborde de aguas servidas. La problemática persiste, ya que no han atacado la raíz, por lo que los trabajos que realizan no solucionan de una vez por todas este bote de aguas putrefactas”, señaló Ivy Ugueto, habitante de la zona ubicada en parroquia Juana de Ávila, al periodista Jonathan Núñez.
La vecina añadió: “Esto es insoportable, ya somos 30 familias afectadas directamente y no aguantamos más, porque este año la situación está mucho peor”
Ugueto explicó que la Alcaldía de Maracaibo, ante la indiferencia de la Hidrológica del Lago de Maracaibo (Hidrolago), atendió el caso. Sustituyó un colector de aguas residuales en agosto de 2023.
Sin embargo, aseguró que la acción de la municipalidad no resultó suficiente, porque una vez más la tubería volvió a colapsar haciendo que las aguas servidas se empocen frente a 30 viviendas, llegando hasta una institución educativa.
“Nuestras casas están llenas de esa agua de porquería, lo que ha convertido estos espacios en criaderos de dengue, malos olores, zancudos y moscas. Ya muchos vecinos se han enfermado del estómago, la piel y los pulmones”, aseveró, molesta, según reseña Núñez en su blog El hecho destacado.
Agregó: “Le hacemos un llamado a Hidrolago, la Alcaldía de Maracaibo y a la Gobernación de Zulia para que vengan y hagan el trabajo que se necesita para que cese el desbordamiento de estas aguas sucias y nosotros podamos volver a vivir con tranquilidad”.
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noviembre 15, 2024
