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Durante una entrevista concedida al diario español El País, mencionó que la mesa uno (del diálogo) era “supuestamente” para devolverle a la Asamblea Nacional (AN) sus poderes como órgano legislativo del Estado, sin embargo, indicó que el Parlamento perdió tres facultades en esa fase: la posibilidad de hacerle un juicio al presidente de la República, la posibilidad nombrar a los rectores del Consejo Nacional Electoral (CNE) y la inmunidad parlamentaria refiriéndose a la detención del diputado suplente Gilbert Caro.
“Y ni qué hablar de lo que ya había perdido sin la rendición de cuentas del mandatario ante la Asamblea ni la aprobación del presupuesto. Es el descalabro llevado a sus últimas consecuencias. Estamos hablando de variables absolutamente autoritarias”, agregó.
Cuestionó la “contradicción muy importante” que existe en la segunda mesa, donde se discutía la liberación de los denominados presos políticos al indicar que actualmente existen “nuevos presos de este tipo”. “Cuando hay una negociación de este carácter, lo menos que se puede hacer para demostrar la buena fe en el diálogo es que no haya nuevos encarcelamientos”, apuntó.
Por otra parte, indicó que el Referendo Revocatorio (RR) contra el presidente de la República, Nicolás Maduro, era una consulta que no podía formar parte de una de las mesas de negociación debido a que se trataba de un derecho electoral, dijo, que pertenece “a los cientos de miles de venezolanos que firmaron y que no podían ser dejados en la calle en cuanto a su derecho de revocar” al Jefe de Estado.
A su juicio, en el país no se avizora la realización de elecciones ni adelantadas ni las “atrasadas” en alusión a las regionales que estaban programadas, de acuerdo a la Constitución de la República, para el año pasado. “Todos los gobernadores ya traspasaron su periodo de gobierno y todavía no hay ni siquiera miras a unos comicios. Todos los derechos electorales del pueblo han sido completamente avasallados por esa mesa de diálogo”, puntualizó.
Almagro afirmó que existe un “deterioro institucional” en Venezuela que se agrava al observar los juicios en Houston, Estados Unidos, por los “casos de corrupción” en Petróleos de Venezuela S.A. (Pdvsa) y por el caso de narcotráfico de los sobrinos de diputada y primera dama presidencial, Cilia Flores.