La fiscal general, Luisa Ortega Díaz, no está con la MUD, ella defiende al chavismo disidente del madurismo, le es útil a la oposición en su lucha contra el régimen, pero no son lo mismo
Desde el distanciamiento de la fiscal, Maduro enfrenta dos oposiciones; la MUD y el chavismo que estaba adherido inercialmente al madurismo, resignado a desaparecer.
Leopoldo López dejó de ser la joya de la corona para el Gobierno, ahora lo es la “constituyente”. Si esta se llega a consumar el liderazgo opositor será reducido a su mínima expresión, los procesos electorales serán manufacturados 100 % a beneplácito del madurismo, tal como está ocurriendo con las “elecciones” a la ANC.
Si las rectoras del CNE se hubiesen obsesionado con la realización del revocatorio en 2016, como hoy con la “constituyente”, Venezuela ya tendría un año con nuevo gobierno.
¡Importante! Cuando los gobernantes se encaprichan obsesivamente con algo los pueblos deben temer.
A pesar de las grietas en la liberación de Leopoldo López, el Gobierno lleva la peor parte, ¿cómo otorgar ese beneficio a quien supuestamente es la “máxima expresión del fascismo y la derecha”? Tiene mucho que explicar a sus acólitos, ya no puede ocultar su debilidad interna y lasitud internacional.
La “constituyente” se desinfla cada vez más rápido, es rechazada por 90 % de la población.
La propaganda electoral de los “candidatos a constituyentes”, impuesta por cadenas nacionales, ha sido un autogol, es la mejor ofensiva contra la “constituyente”, desbordada de improvisación, desconocimiento, disociación, radicalismo minoritario, chabacanerismo, asfixiante más de lo mismo, entre un sinfín de elementos deleznables.
Caso contrario ocurre con el plebiscito del domingo 16, nació entre la crítica y el escepticismo, hoy es apoyado por la mayoría del país, irrevocablemente atado a la democracia.
Es determinante comprender lo que ocurrirá en Venezuela no depende de lo que haga o deje hacer la Asamblea Nacional ni de lo que haga o deje hacer la fiscal general, lo que ocurrirá dependerá de lo que haga o deje hacer el pueblo.
La presión internacional es una espada de Damocles, el Gobierno no cuenta con apoyos incondicionales sino con el apoyo tarifado que sus paupérrimas finanzas y oferta petrolera le permiten.
Ante el nubarrón generado por el “casa por cárcel” a Leopoldo López, María Corina Machado pudiera fortalecer su imagen, acumula simpatías en el escenario radicalizado.
La “constituyente” responde a la necesidad/realidad del Gobierno de “morir con Maduro” porque no tiene figura sustituta, todo el liderazgo gubernamental es dramáticamente rechazado por el pueblo, dicho sea de paso, liderazgo que hoy son candidatos protagonistas a la falsificada constituyente.
Maduro se sustenta en la violencia institucional, la permisada a bandas delictivas, en la amenaza a empleados públicos, así como en el chantaje a beneficiarios de las misiones ¡Insostenible!
Los escenarios son: Negociación o… sangre.
diciembre 8, 2024
