Diecinueve meses después, las organizaciones criminales que operan en la capital zuliana descargaron su ira contra el gremio periodístico. En el interior de la imponente estructura de paredes grises y azules solo quedaron tres escritorios de fórmica y cinco sillas metálicas
En horas de la madrugada de ayer, unos delincuentes ingresaron a la sede regional del Colegio Nacional de Periodistas (CNP). Tras sustraer tres computadoras HP, un televisor pantalla plana de 32 pulgadas, equipos audiovisuales y de prensa, huyeron sin dejar rastro.
Cuando los medios de comunicación arribaron a la avenida 19 con calle 80 del sector Primero de Mayo, parroquia Chiquinquirá del municipio Maracaibo, observaron el cercado eléctrico de la institución doblado. Los antisociales también desprendieron la reja de la ventana corrediza y destrozaron parte de la pared.
Leonardo Pérez, secretario general del CNP-Zulia, expresó su indignación. No es la primera vez que roban el colegio, el pasado año “atravesamos por una situación semejante”, cuando dos hampones aprovecharon la oscuridad de la noche para llevarse un aire acondicionado.
Diecinueve meses después, las organizaciones criminales que operan en la capital zuliana descargaron su ira contra el gremio periodístico. En el interior de la imponente estructura de paredes grises y azules solo quedaron tres escritorios de fórmica y cinco sillas metálicas.
Los trabajadores del CNP presumen que los ladrones cortaron los alambres de aluminio del cercado, saltaron la pared de concreto y luego rompieron la protección de la ventana con una segueta. En cuestión de minutos la reja les quedó en las manos.
Una vez dentro de la oficina comenzaron a desconectar las computadoras y meter lo que podían en una bolsa plástica negra. Con el robo de los equipos de prensa resulta difícil difundir información en la página web, la radio en línea y el blog del CNP, comentó Pérez.
Esperanzas
El secretario de la organización hizo un llamado a las autoridades para que preserven la integridad de los marabinos. Espera que los funcionarios de la Policía científica den con el paradero de los vándalos y recuperen los equipos electrónicos robados.
Seguir adelante es la consigna de los miembros de la institución, crecerse ante las dificultades y ser eficientes a pesar de la falta de recursos financieros. “El llamado es a los agremiados. Este es el momento de solidarizarse con quien les brindó apoyo cuando el hampa desbordada atacó sus sedes”, apuntó.