Caled
Caled Josué León Ortiz, un niño de apenas un año y tres meses de nacido, falleció ayer a las 5.00 de la tarde por inmersión, luego que inocentemente se metiera en la piscina de un parcelamiento ubicado en la avenida Bicentenaria, en el municipio Santa Rita, donde su padre, quien es albañil, realizaba unas reparaciones.
Según una fuente policial, cuando los padres notaron la ausencia del pequeño, revisaron cada rincón entre esos la piscina donde localizaron el cuerpo flotando. De inmediato, lo sacaron y lo llevaron hasta el área de emergencia del Hospital Senén Castillo Reverol, pero los médicos de guardia se percataron que el infante no presentaba signos vitales.
Al centro asistencial se presentó una comisión de la Policía Científica de Cabimas. El cadáver de Caled lo trasladaron hasta la morgue del Hospital Adolfo D'Empaire.