EL 60 por ciento de los nueve mil 151 portadores de VIH presenta bajo peso y mal nutrición
Nueve mil 151 personas viven con VIH en el Zulia, según el último reporte obtenido en diciembre por la organización Acción Zuliana por la Vida (Azul Positivo). Los cálculos realizados por esta ONG demuestran que para noviembre de 2017, la dotación de medicamentos existentes en los almacenes del Servicio Autónomo de Elaboraciones Farmacéuticas (Sefar) alcanza hasta la primera quincena de febrero.
De 26 protocolos existentes para tratar el Virus de Inmunodeficiencia Humana, en el Zulia solo se están aplicando cuatro y de los 26 fármacos que integran las terapias, solamente hay disponibilidad de seis y en escasas cantidades.
Se encuentran disponibles y en pequeñas cantidades los antirretrovirales Insentress, Lamivudina, Kivexa, Viraday, Zidovudina, Prezista, de los cuales solo el Viraday es un trivalente y funciona administrado como fármaco único. El resto requiere ser combinado con otros medicamentos, en su mayoría no disponibles, asegura Johan León, director general de Azul Positivo.
Debido a la escasez de medicamentos, los médicos intentan masificar el uso del Viraday, pero este fármaco contiene Efavirenz, un compuesto que resulta tóxico para el hígado. “No todos los pacientes pueden consumirlo, mucho menos las mujeres embarazadas, porque afecta al feto”, enfatiza León.
Población desprotegida
El 60 por ciento de los pacientes zulianos no recibe sus protocolos para mantener a raya la enfermedad, tal como lo reflejan las cifras no oficiales, si se toma en cuenta que el único medicamente efectivo es el Viraday y tan solo lo consume el 35 por ciento de la población afectada.
El déficit de antirretrovirales podría sumar un índice del 85 por ciento, ya que, además de los protocolos para tratar la enfermedad, los pacientes deben consumir otras medicinas que reducen las enfermedades oportunistas, como afecciones gástricas, pulmonares y cutáneas, entre otras.
Otra situación que enfrentan los pacientes con VIH es el aumento de los índices de mal nutrición y desnutrición, que ya alcanzan el 60 por ciento. Además, la situación de riesgo en la que se encuentran por la inminente falta total de antirretrovirales, les produce depresión y otros problemas psicológicos y emocionales.
En el margen más desolador de esta realidad están unos 510 enfermos que se tratan con el medicamento Complera, fármaco que no llega al país desde mace más de ocho meses. “Estos pacientes tiene hasta nueve meses sin tomar medicinas y esto es grave porque este antirretroviral es “de rescate”, lo que significa que representa la última oportunidad para quienes ya desarrollaron Sida”, explica León y argumenta que a muchos los médicos les cambiaron los esquemas de tratamiento “bajo todo riesgo, porque en Venezuela desde hace más de seis años no hay una prueba llamada Resistencia Viral que permitiría ver si el cambio es viable”.
Cifras alarmantes
En 2017 se detectaron mil 917 nuevos casos de VIH en el Zulia. Según estima León, esta es la cifra más alta registrada en la región durante los últimos años, ya que el promedio anual era de mil 100 contagios. La población más susceptible habita en la Guajira.
Este incremento en los índices de morbilidad responde a dos factores primordiales: la escasez y el alto costo de los preservativos o condones, y la total ausencia de programas de educación y campañas de prevención del VIH/Sida, tal como lo refiere León.
“Es importante que se destaque que la sociedad civil organizada y los más de 77 mil pacientes venezolanos exigimos al ministro Luis López aceptar un canal humanitario para empezar a solventar esta grave situación”, insiste León y asegura que los enfermos no pueden pasar ni un día más sin sus esquemas de tratamiento. Es una cuestión de vida o muerte.
Antirretroviral
Los fármacos antirretrovirales son medicamentos para el tratamiento de infecciones por retrovirus como el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), causante del síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA). Diferentes antirretrovirales se utilizan en varias etapas del ciclo vital del VIH. El conjunto de varias combinaciones de tres o cuatro fármacos se conoce como Terapia Antirretroviral de Gran Actividad (TARGA). Las combinaciones de antirretrovirales incrementan el número de obstáculos para la mutación viral y mantienen bajo el número de copias virales. No suprimen la infección por VIH a largo plazo, por lo cual deben usarse en combinaciones.