
La escasez del agua por tuberías es un tema que se mantiene en el tapete en el municipio Santa Rita. Las cuatro parroquias, sin excepción, resultan afectadas por la falta de suministro del mineral. Los vecinos solicitaron ayuda gubernamental, puesto que abastecerse por medio de camiones cisterna les resulta imposible por dos puntos esenciales; la forma de pago y el manejo de los costos, aunque en la localidad está regulado el llenado de cada pipa en ocho mil bolívares
Alenis Guerrero, alcalde de Santa Rita, se reunió el pasado martes con los vecinos del sector Monti Club, en el salón de sesiones del ayuntamiento, a fin de tratar el tema que los afecta hace seis meses.
“Desde la alcaldía no escatimamos esfuerzos para atender a los santarritenses con agua gratuita y hasta la regulación del costo por pipa de los camiones privados, como una forma de atacar el índice especulativo en la ciudad. Por otra parte son fundamentales y positivas las reuniones con las instituciones públicas encargadas de solventar esta grave crisis que ha afectado el municipio”, comentó la autoridad municipal.
Guerrero propuso a los presentes constituir con una comisión que se encargue de hacerle seguimiento a los trabajos que ejecuta Hidrolago, con el propósito de solucionar la escasez del agua que no solo afecta a Santa Rita, sino también al resto de los municipios de la Costa Oriental de Lago.
Sequía
En el municipio Cabimas, Costa Oriental del Lago, no se normaliza en su totalidad el suministro de agua por tuberías. En los sectores ubicados en las zonas altas aún el mineral no llega desde hace cinco meses.
Pese a los esfuerzos de los representantes de la empresa hidrológica, el servicio es nulo y ocasiona detrimento en la calidad de vida de los vecinos. Una muestra de ello son aquellos que habitan en las calles San Luis, Mara y Maracaibo del sector Delicias Viejas, ubicado en la parroquia Carmen Herrera.
María Zabala, es una de las afectadas, y asegura que es difícil abastecerse de agua a través de los camiones cisterna, puesto que los choferes, cobran 15 el costo del llenado de una pipa si el pago es en efectivo y entre 25 y 30 mil si es por transferencia bancaria.
“Estamos cansados. Dicen que están bombeando y cuando uno chupa la manguera lo único que sale es aire y tierra. El olor de los sumideros es horrible ya que poca agua circula por las tuberías. Las autoridades no entienden que estamos expuestos a la insalubridad por culpa de la incompetencia. Nadie dice nada y si uno llama a Hidrolago en Cabimas, quien atiende no sabe darle a uno una respuesta de qué es lo que sucede”.