
Francisco Valencia, director de Codevida, a su juicio, “el Gobierno no tiene la capacidad para dar respuesta ante la magnitud del problema”
Pacientes con enfermedades crónicas y ONG se concentraron en las cercanías del Ministerio de Salud, en el centro de Caracas. Personas hemofílicas, trasplantadas, con acromegalia, Parkinson y VIH se reunieron desde esta mañana con pancartas alusivas a la manifestación, para exigirle al ministro de Salud, Luis López, una respuesta inmediata ante la escasez de medicinas y la apertura del canal humanitario.
«Queremos tratamiento», gritaban a coro los manifestantes, mientras que los carteles que llevaban en sus manos indicaban lo siguiente: «exigimos tratamientos antirretrovirales ya, no queremos morir». La Policía Nacional Bolivariana estuvo presente en los alrededores de la torre ministerial y permitió el acceso de un grupo de seis personas a las instalaciones, donde por unos instantes hubo un careo entre los manifestantes y los funcionarios.
La representación de los seropositivos exigió a López que agilice los trámites para la compra de 27 presentaciones de antirretrovirales que requieren cerca de 80 mil seropositivos del país. Un funcionario del despacho bajó a conversar con los representantes de las diferentes ONG que defienden el derecho a la salud y la vida de las personas con VIH y les dijo que serían atendidos por un viceministro. Los integrantes de las organizaciones, sin embargo, le enfatizaron que querían hablar con López.
Alberto Nieves, director ejecutivo de la ONG Acción Ciudadana contra el Sida (Accisis), instó al Gobierno a respetar la decisión que tomó el Tribunal Supremo de Justicia que le exige garantizar el acceso de antirretrovirales para pacientes con VIH. “Venezuela se muere y responsabilizamos al presidente Nicolás Maduro, de todas las muertes que ocurran en el país por falta de medicinas para VIH”.
Nieves apuntó que nueve personas con seropositivos fallecen diariamente por la falta de antirretrovirales e incluso de medicinas para infecciones oportunistas asociadas al virus. Indicó que cerca de 10 mil pacientes actualmente están en riesgo de morir, mientras el Estado niega la crisis sanitaria y soslaya la apertura de un canal humanitario.
“Acá el Gobierno no puede decir que la escasez es culpa de las sanciones. Nosotros sabemos que el desabastecimiento comenzó desde 2009, año en el que había dinero en el país por los altos precios del petróleo, pero solo se priorizó la compra de armas”, fustigó Nieves.
Contra la pared
Tras pasar lo que quedaba de mañana y parte del mediodía reunidos con Yassin Alemán, viceministro de Redes de Salud Colectivas; los representantes de las ONG, bajaron a las 2.00 de la tarde para informar que el Estado venezolano no tiene para dar una respuesta satisfactoria a los pacientes con enfermedades crónicas.
Francisco Valencia, director de la Coalición de Organizaciones por el Derecho a la Salud y la Vida (Codevida), detalló que el funcionario escuchó cada uno de los planteamientos presentados, pero a su juicio, el “Gobierno no tiene la capacidad para dar respuesta ante la magnitud del problema que pasa Venezuela con el tema de medicamentos, insumos y situación hospitalaria”.
Destacó que en la actualidad, el ente de salud tiene “serias dificultades” solamente con el tema de la malaria. “Le manifestamos que existen mecanismos como la Organización Panamericana de la Salud y países dispuestos para aportar al fondo de emergencia para aliviar esta situación inmediata. La respuesta concreta: no hay respuesta”.
Valencia pidió al ministro que se sincere y le diga al presidente Nicolás Maduro, que es necesaria la cooperación internacional, pues recordó que el único responsable de la crisis es el Gobierno. “Si el Ministerio de Salud no responde en 24 horas, tendremos que ir a Miraflores. No se puede esperar un día más sin medicinas”.
Calificó como insólito que el Ministerio para la Salud nos pida cifras de cuántos enfermos hay. “Ellos deben llevar esa estadística”, y destacó como inaceptable el recibimiento que le dio la Policía a los manifestantes.