La Comisión de Regulación de los Servicios Financieros de la caribeña Antigua y Barbuda dictó una serie de medidas administrativas de excepción contra el BOI Bank, filial del Grupo Financiero BOD, en función de salvaguardar el patrimonio de la organización y vigilar “las mejores prácticas” bancarias
La Comisión de Regulación de los Servicios Financieros de la caribeña Antigua y Barbuda dictó una serie de medidas administrativas de excepción contra el BOI Bank, filial del Grupo Financiero BOD, en función de salvaguardar el patrimonio de la organización y vigilar “las mejores prácticas” bancarias.
La información fue revelada por el portal especializado Banca y Negocios que obtuvo una copia de la decisión, aunque aclaran que el sitio web del regulador antiguano aparece bloqueado. Se espera un comunicado del BOD que aclare la situación.
Según la comunicación, a partir del 18 de septiembre, el BOI Bank está obligado a no realizar captación de nuevos clientes ni abrir certificado de depósitos de clientes existentes; entregar un balance financiero semanal o facilitar reportes diarios de todas las inversiones.
Asimismo, la entidad financiera está comprometida a pedir autorización para toda operación mayor a dos mil dólares. Tampoco estará autorizado a repagar ningún crédito o pagar dividendos, distribuir acciones y emitir derechos.
Este sería el cuarto banco del holding del BOD sometido a medidas administrativas. Según su presidente, Víctor Vargas, el BOI Bank no tiene problemas de solvencia.
El Grupo Financiero BOD está integrado por instituciones bancarias, empresas aseguradoras y de mercado de capitales cuyas sedes se reparten entre Venezuela y varios países del Caribe.