Los delincuentes al ver las patrullas huyeron al oeste, iniciándose una persecución, recorrieron la Circunvalación 2, y en el sector La Matancera se adentraron entre los barrios cercanos a la antigua Cárcel Nacional de Maracaibo
En el barrio San Pedro tres robacarros se enfrentaron a una comisión de la Dirección de Inteligencia y Estrategias Preventivas (Diep) el pasado jueves a las 8.30 de la noche. En el intercambio de disparos Miguel Ángel Chourio Rodríguez (33) cayó herido y murió luego de ingresar al hospital, Andrés Eduardo Fernández Escudero (26) quedó preso y un tercero se escapó.
La Policía informó que durante labores de inteligencia por el corredor vial Cecilio Acosta, los funcionarios avistaron a los tres sujetos a bordo de un Chevrolet Monza, de color gris, placa AC614VG. Al trío de hampones los agarraron en flagrancia robándole la camioneta a un ciudadano. Los delincuentes al ver las patrullas huyeron al oeste, iniciándose una persecución, recorrieron la Circunvalación 2, y en el sector La Matancera se adentraron entre los barrios cercanos a la antigua Cárcel Nacional de Maracaibo.
Los uniformaron intentaron inmovilizar el vehículo disparándole. En su mayoría en el vidrio trasero. Un proyectil alcanzó el vidrio frontal, uno en su costado izquierdo, que perforó a su vez el caucho, lo que originó que los delincuentes descendieran y abrieran fuego ante la comisión policial. Durante el intercambio de disparos, uno de los malhechores aprovechó y huyó a pie. Mientras que Fernández se rindió y Miguel Ángel, su compinche, cayó herido. Los uniformados lo trasladaron en una camioneta hasta el Centro de Atención Integral Lago Azul, pero ingresó sin signos vitales. En el lugar de los hechos se incautó una pistola calibre nueve milímetros. La Policía científica levantó el cadáver de Chourio y lo trasladaron hasta la morgue de Maracaibo.
La progenitora de Chourio, Jeni Rodríguez, indicó en la morgue de Maracaibo que desconocía lo que había sucedido. "Solo me llamaron diciéndome que habían matado a mi hijo, que según lo agarraron robando". Explicó que su hijo ya había estado implicado en varios delitos. Hace tan solo un mes salió en libertad del retén El Marite, donde purgó 24 meses de condena por el delito de robo. "Mi hijo era marañero, arreglaba cosas y hacía trabajitos en la calle".
Los investigadores recibieron el Monza que usaron los delincuentes para ser sometido a pruebas de criminalística. El detenido ayudará a llevar a cabo la aprehensión del sujeto evadido de la justicia.