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A las 12.00 de la medianoche dos delincuentes desconectaron el cableado que surtía de energía eléctrica la casa de Irwin Ricardo Zambrano Isea, de 33 años. Aprovecharon la oscuridad, se introdujeron por la parte posterior de la vivienda y le dispararon a las personas que se encontraban en el patio ingiriendo licor. Durante la balacera murieron dos hombres y cuatro resultaron heridos, el pasado viernes, en el sector Pueblo Nuevo de los Puertos de Altagracia.
Irwin falleció en el acto. Las múltiples balas que atravesaron su humanidad lo acabaron en segundos. A los heridos los trasladaron hasta el Hospital Hugo Parra León, donde unos se encuentran al borde de la muerte y otros ya fuera de peligro.
Una fuente ligada a la investigación comentó que Irwin llegó al municipio el viernes en la mañana. Él se encontraba fuera de la localidad escondiéndose de sus enemigos que tenían como objetivo eliminarlo. Al parecer Irwin "volvió para asesinar al “Dimita” pero este se dio cuenta y le cayó primero”, dijo el funcionario.
El segundo ultimado es Carlos Daniel Raga Medina, de 16 años. Recibió un disparo en la cabeza. Lo llevaron hasta el Hospital General del Sur en Maracaibo y horas después falleció.
Frank Piña, presentó tres heridas entre la ingle y la pierna; Alfredo Del Moral, recibió siete disparos y se encuentra en la UCI, Enzo Bohórquez y Rainell Caldera ya están fuera de peligro.
Según testigos escucharon más de 40 detonaciones. En el lugar había cerca de 15 personas disfrutando de la ingesta alcohólica. “Quien disparó con una ametralladora fue el “Dimita” conocido sicario de la zona y cobrador de vacunas”, comentó uno de ellos.
Trascendió que Irwin fue por muchos años el chofer de Frederick Pirela Escalona, alias el “Frederick”. También era propietario de la empresa Coopertativa Cooandamiom y hace cinco años lo secuestraron. Ocho hombres fuertemente armados se lo llevaron de la finca La Mandarina, en el sector Gavilacintos, parte alta del municipio Obispo Ramos de Lora, cerca de El Vigía, estado Mérida. Los delincuentes sorprendieron a Zambrano por la puerta trasera de la vivienda de su finca, cuando este salía para darle comida a los animales. Su esposa también estaba en el lugar. La desaparición forzosa ocurrió por cuatro horas.