Los vecinos aseguran estar cansados de esperar por la atención gubernamental requerida. Reuniones y protestas son parte de las acciones realizadas con el fin de hacer sentir sus voces, pero todo ha sido en vano, dijo Alejandro Bastidas, vecino de la urbanización Los Médanos
Completamente abandonada a su suerte. Así está la avenida 31 desde la carretera H hasta la K, importante vía de acceso que atraviesa las parroquias Rómulo Betancourt y Jorge Hernández del municipio Cabimas. Está enmontada, inmensos cráteres y aguas negras la adornan de punta a punta.
Los vecinos aseguran estar cansados de esperar por la atención gubernamental requerida. Reuniones y protestas son parte de las acciones realizadas con el fin de hacer sentir sus voces, pero todo ha sido en vano, dijo Alejandro Bastidas, vecino de la urbanización Los Médanos. “A nadie le duele lo que uno pasa como ciudadano. Esto es una historia sin fin. Son años y años que pedimos el cambio de los colectores y un buen asfaltado, pero nunca lo han hecho”.
La carretera carece de asfaltado y además tiene inmensos huecos que la hacen intransitable. En varias zonas se visualizan bocas de visitas destapadas y algunos drenajes subterráneos que la atraviesan y que permanecen sin su rejilla. También ha crecido monte a mitad de la calle y la acompañan basura, muros de tierra y escombros.
“Una vez nos prometieron un asfaltado completo de la calle. Sabemos que el trabajo lo hicieron en un tramo, pero por aquí no se aparecieron”, manifestó Marisabel Suárez, vecina de la calle. La representación de los consejos comunales responsables del lugar aseguran que las diligencias para solucionar el problema se hicieron y se hacen de acuerdo con las necesidades, pero aún esperan por ser escuchados. “Nos hemos movido. También somos afectados y queremos que esto cambie, pero no nos escuchan”, dijo una vocera del consejo comunal, quien prefirió omitir su nombre.