Hugo Chourio y Aníbal Fuenmayor son cuñados y al parecer estaban robando un minilunch diagonal al IUTM. Los funcionarios de Polimaracaibo agarraron a los delincuentes en flagrancia, dieron la voz de alto y los vándalos no la acataron, se enfrentaron
Las sirenas de las patrullas de la Policía municipal de Maracaibo alertaron a la comunidad adyacente al sector La Floresta al oeste de la capital zuliana. En la avenida 85 con calle 79 se desarrolló un presunto enfrentamiento entre policías y Hugo Rafael Chourio Romero (20) y su cuñado Aníbal José Fuenmayor Ávila (18).
Los efectivos indicaron a la prensa que el par de jóvenes estaba robando en el minilunch El Gallo, diagonal al Instituto Universitario de Tecnología de Maracaibo (IUTM). Los uniformados actuantes los avistaron en flagrancia y les dieron voz de alto pero Chourio y Fuenmayor hicieron caso omiso, y accionaron sus armas contra la comisión policial.
En el lugar de los hechos quedó una pistola calibre 38 y un revólver nueve milímetros, niquelado. Ambas armas no estaban solicitadas. Los funcionarios trasladaron a los heridos hasta el Centro de Diagnóstico Integral (CDI) La Macandona, donde certificaron el deceso de los cuñados.
En la morgue, los familiares llegaron para reclamar los cadáveres, sin saber qué había ocurrido. Aníbal Fuenmayor padre, explicó que los muchachos vivían en la misma calle, en el sector Santa Marta, en La Concepción. Dijo que a las 6.30 de la tarde del pasado jueves Hugo y Aníbal salieron de casa de este último sin decir a dónde iban y a las 9.00 de la noche les notificaron que estaban muertos.
El progenitor indicó que Aníbal, quien era el mayor de tres hermanos, trabajaba como albañil, limpiaba patios de casas y en tiempos de Feria vendía mangos tipo "viagras". De Hugo, el mayor de seis hermanos, contaron que recientemente estaba sacando tercer año de bachillerato en parasistema. Tenía una moto alquilada con la que trabajaba como mototaxi en las mañanas. Trascendió que ninguno tenía antecedentes penales.
Las familias se veían desconcertadas, miradas perdidas, intrigados por conocer la verdad de los hechos. Pidieron a las autoridades explicación por la muerte de sus parientes. "De tener pruebas contundentes sería otro cantar, en el lugar los testigos nos dijeron que la Policía había matado a dos chamos en la calle", dijo una pariente en anonimato.
9.00 de la noche del jueves se enfrentaron los presuntos maleantes