Los trabajadores de la planta Maracaibo de Coca-Cola Femsa permanecen en los alrededores de la industria. Ayer sumó tres días de cierre. Según el personal, hay una suspensión “arbitraria”, que para la compañía se ejerció por la falta de azúcar para procesar las bebidas refrescantes
Los trabajadores de la planta Maracaibo de Coca-Cola Femsa permanecen en los alrededores de la industria. Ayer sumó tres días de cierre. Según el personal, hay una suspensión “arbitraria”, que para la compañía se ejerció por la falta de azúcar para procesar las bebidas refrescantes. Mientras esperan una decisión del Ministerio del Trabajo por la restricción y garantía de beneficios, reclamaron volver a sus puestos.
“No queremos compensación, queremos que nos paguen los que nos corresponde por ley. No queremos limosnas, que respeten nuestro salario. Mientras se da el procedimiento pueden darnos charlas. Hacerle mantenimiento preventivo. Hay cosas que hacer en la planta”, acusó Andrés López, almacenista de materia prima.
El personal percibió los salarios correspondientes a la semana anterior. Larry Pérez, dirigente sindical, señaló que la discusión es por los pagos a futuro. La empresa ofreció una compensación que la masa laboral rechaza y espera una medida de la Inspectoría del Trabajo.
Andrés López reconoció que “sí hay dificultad para producir” y recordó que la Inspectoría es la competente para determinar la paralización. Lo que “no quiere decir que se vaya aprobar de una vez, el pronunciamiento no puede restringir beneficios”.
En un comunicado la multinacional informó que se “reafirma que durante la interrupción temporal de producción de sus plantas, anteriormente anunciada, se ha ofrecido a los trabajadores una compensación que ha llamado solidaria”.