
Thierry
Thierry Darantière, de 52 años y director de una casa de retiro católico, confesó este lunes ante el tribunal de apelación de Yvelines, Francia, haber abusado sexualmente de 66 menores (con edades comprendidas entre los 7 y los 17 años) en Sri Lanka, Túnez y Egipto entre 2002 y 2011, informa el periódico ‘Le Parisien’. “Lamentos que parecen inútiles para estos jóvenes que nunca voy a volver a ver”, dijo el acusado en el juicio.
La investigación comenzó en febrero de 2011 cuando el FBI dio con el paradero de Darantiére a raíz de sus actividades relacionadas con la pederastia infantil: los agentes interceptaron un vídeo y 130 fotografías que mostraban relaciones sexuales entre chicos de origen indio y un hombre de unos 40 años. En mayo de 2012 fue detenido por las autoridades francesas, reseña RT Noticias.
Una misión humanitaria como pretexto
Darantière acudió a realizar misiones humanitarias con una asociación bretona después del tsunami que devastó el país en 2004. En su primera audiencia, Darantière confesó haber mantenido relaciones sexuales con menores “que se le acercaban cuando estaba en la playa o dando un paseo en bicicleta”.
En el país asiático se aseguró los servicios de un proxeneta, a quien ayudó financieramente para que se comprara una furgoneta y abriera una tienda multimedia. Este hombre, de 32 años, le proporcionó una habitación y 18 niños que recibían bebida, comida, calzado y unos pocos euros a cambio de sexo.
El director de la casa de retiro católico asegura que es consciente de que hizo daño a sus víctimas, se describe a sí mismo como “bisexual con tendencia a la pedofilia” y se considera “enfermo” y “víctima de pulsiones”. Los informes psiquiátricos no han detectado ninguna enfermedad mental. Se espera que el veredicto se anuncie este jueves