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Un evento sin permisología ni control por parte de las autoridades pertinentes terminó en un doble homicidio en el barrio Rafito Villalobos al norte de Maracaibo, en la parroquia Ildefonzo Vázquez. Delincuentes asesinaron a Ronald Ruiz Álvarez, de 30 años, y a su compadre Alberto Escorpín Mosquera, de 24.
A los amigos los mataron la madrugada de ayer en la calle 39 con avenida 27 del barrio. En la vivienda N° 38-90 se desarrollaba un evento de la miniteca Música Dance. La comunidad lo conoce como minitecas. El dueño de la casa, apodado el "Pulga", acostumbra a alquilar unas cornetas, cobrar 300 bolívares de entrada y vender cervezas. Ayer se le descontroló el festejo al final del mismo. Los habitantes señalaron al "Quiño", al "Moisés" y al "Catanare" como responsables de darle muerte a Ruiz y Mosquera, ambos de nacionalidad colombiana.
María Álvarez Rodríguez, tía de Ronald, dijo ayer en la morgue que habían asistido en primera instancia a la miniteca Power Factory, a una cuadra de su residencia, pero a las 12.00 de la medianoche salieron de problemas con unos asistentes y los organizadores prefirieron dar por finalizada la fiesta. De allí, los presentes asistieron al guateque en la casa del "Pulga".
Yohana Mina, residente del sector explicó que la gran mayoría de las personas se mudaron a la segunda fiesta. "Todavía era temprano y como aquella estaba animada los muchachos fueron". Al cierre del evento, a las 2.00 de la mañana arrancó la tragedia. La música quedó enmudecida con el rugir de las pistolas. Los casi 200 asistentes corrían para esconderse de las balas y los vecinos se aferraban a la suerte para no ser víctimas colaterales.
Los familiares dijeron que los testigos del hecho de sangre contaron que la fiesta se desarrolló con normalidad, pero al cierre, se escucharon los disparos. Cuando cesó el careo, los cuerpos de los amigos estaban uno al lado del otro. Ronald con ocho heridas de bala y Alberto con cuatro, frente a la residencia, sobre la arena de la calle. Al parecer, las víctimas tuvieron unas palabras con los tres señalados y estos los emboscaron por la espalda, y los asesinaron. La comunidad los señaló como peligrosos ladrones de la barriada e indicaron que vivían en el sector 23 del lugar.
La Policía regional atendió el llamado de alerta y resguardó la escena. La Policía científica se entrevistó con los testigos y levantaron los cadáveres. Investigan si el tiroteo se produjo dentro de la casa del "Pulga" o afuera.
Trascendió que las víctimas tenían más de cinco años viviendo en Venezuela. Trabajaban vendiendo bolsas de agua en el centro de Maracaibo. Vivían juntos, Ronald dejó en orfandad a dos hijos y eran nativos de La Candelaria, en Cartagena, Colombia.