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Las autofotos o selfies llegaron para revolucionar la forma de fotografiarse. Sin embargo, una nueva tendencia estaría a punto de marcar pauta en las redes sociales. Países como Chile e Inglaterra han implementado un cambio a la hora de tomar una foto para subirla a las diferentes plataformas digitales. En Brasil hay más selfies tradicionales, en China son muy populares entre los jóvenes, mientras que en la frontera entre Turquía y Siria son considerados demasiado informales para hacerlas públicas.
Estas conclusiones salen del grupo de antropólogos que se desperdigó por todo el planeta para vivir en el mundo virtual de diferentes países y comparar después sus experiencias en el University College London. Vivieron 15 meses en ocho países distintos, en lugares variados que incluían una aldea inglesa, una ciudad industrial y otra rural en China, una ciudad en la frontera entre Siria y Turquía, comunidades de bajos ingresos en Brasil y Chile, un complejo informático entre unas aldeas indias y pueblos en Italia y Trinidad. Su misión era analizar cómo la población local se comportaba e interactuaba con las redes sociales.
Footies
Una de las antropólogas que se dedicó a investigar en Chile, explicó que la red más usada en ese país es Instagram pues “Twitter les parece frío y limitado”. Con respecto al material que se sube a las redes predominaron las footies o fotos de pies. La gente joven, cuenta, “mientras ven televisión o juegan, toman fotos de lo que está delante de ellos, incluidos sus pies, y usan hashtags como #RelajadoEnCasa”.
Uglies
En el otro lado del mundo, específicamente en Inglaterra, a pesar de que los selfies son considerados como una expresión de narcisismo, la gente ha comenzado a usar los uglies como una manera de expresar la confianza que le tienes a un amigo cercano. Las características de estas imágenes son de caras graciosas, muecas y todo lo que vaya en contra del glamur de los famosos selfies. La antropóloga manifiesta que “por supuesto que en todas partes hay mucha gente que publica sus fotos tradicionales y aquellos en los que se esfuerzan por aparecer lo mejor posible, pero no debemos olvidar que no son los únicos”.
EN PELIGRO DE EXTINCIÓN
La inclinación a tomarse selfies podría estar llegando a su final. Desde 2014 se han registrado 49 muertes vinculadas de manera directa a esta, aparentemente arriesgada, moda. En concreto, 19 de estos fallecimientos han sucedido en India. Es en este país donde los medios han acuñado el término selfie fever a la aparente adicción. Las autoridades han actuado para intentar frenar esta práctica en algunos “lugares peligrosos”. En la ciudad de Bombay se prohíbe esta práctica, que hasta puede ser penada por la ley.