Maduro
El presidente Nicolás Maduro, indiscutiblemente quedó desbalanceado con la humillante derrota que recibió su Gobierno en las elecciones parlamentarias del 6-D de 2015.
Maduro está poniendo en práctica el mecanismo de defensa de la racionalización mediante el cual la persona se resiste a aceptar la realidad de la cosas o sus culpas, y se convence que no deseaba los objetivos que nunca consiguió, o busca razones aparentemente lógicas que justifiquen los errores cometidos. Ejemplo típico, el de la fábula de la Zorra y las uvas, las cuales no pudo alcanzar después de varios brincos y terminó diciendo: "¡Ah, están verdes!". Se mira en el espejo y dice que el derrotado fue otro.
Maduro se niega a aceptar que su Gobierno está acabado y con él, su revolución comunista. La degradante y vergonzosa derrota que recibió en las legislativas del 6-D, según él no fue producto de la catástrofe que su Gobierno le ha causado a Venezuela, llevándola a niveles de amenaza de hambruna por la escasez y la hiperinflación, sino que el pueblo se confundió, ofendiendo de paso la inteligencia de la casi mayoría de la nación que lo rechaza.
Entonces, amenazaba con que la oposición jamás tomaría la riendas de la Asamblea Nacional porque él lo iba a impedir "como sea", término que encierra el desconocimiento de la voluntad popular y la violación de la Constitución de la República. Pero sabíamos que no era más que una bravuconada. Llegó el 6-D y recibió su paliza. No lo pudo evitar el “como sea” pasó a formar parte de la chistología política de Venezuela.
Recientemente, en una celebración absurda del frustrado y cruento golpe de Estado fallido del 4 de febrero del 92, se preguntó: "¿El pueblo va a permitir que la oligarquía, que ganó la Asamblea Nacional por la confusión de un sector de nuestro pueblo, tome el poder político en Miraflores?". "Para eso es que nos estamos preparando, para no permitirlo ni por una vía, ni por la otra, ni por las buenas, ni por las malas".
Pues sepa, señor Maduro, que ese pueblo que usted llama "oligarquía" ya asumió el poder ganando la Asamblea Nacional, pero lo va a tomar completo cuando se decida la fórmula para salir de usted y de su régimen, y ojalá que sea mediante la vía del revocatorio para que reciba la derrota más concluyente que cualquier político haya recibido en la historia por parte de un pueblo democrático.