Experto acusa de “inconsciencia, irresponsabilidad y negligencia” política de desahogo de represa porque podía emplearse para generar electricidad. Reabiertas las compuestas comprometió mil 600 metros cúbicos de agua en cota que estaba por debajo de nivel óptimo
El presidente Nicolás Maduro ordenó, a inicio de julio, abrir las nueve compuertas de la represa el Guri, reservorio que alimenta de agua a la planta hidroeléctrica Simón Bolívar, la cual genera electricidad y cubre cerca de 60 por ciento de la demanda nacional. La salida de la materia sin cumplirse el protocolo de seguridad y sin presencia de crecida extraordinaria, ni milenaria, supone un acto de “inconsciencia, irresponsabilidad, negligencia. Eso no se hace”, asegura José Aguilar, ingeniero eléctrico y experto internacional energético.
El aliviadero significó mil 600 metros cúbicos por segundo que se desaprovecharon, se “desperdiciaron”. La orden presidencial ocasionó una pérdida de generación de dos mil 400 megavatios día, cantidad similar a la que necesita el Zulia para satisfacer la demanda de energía región. “Han querido hacer un engaño a la población con el aliviadero. Fue un show en tiempo cuando hay debilidad e inestabilidad en el Sistema Eléctrico”.
Se desconocen las verdaderas razones de tirar el agua a las corridas de la cuenta del sur del país. Aguilar explica que la cota estaba en 267, 75 metros del nivel del mar, a casi tres metros del nivel óptimo de 270 metros. “La irresponsabilidad de abrir las nueve compuertas, cuando pudo ordenar solo tres, representó generación de energía que no se producirá. No era necesario. Esto no tiene precedentes”.
La represa presentó escasez de agua en 2016, un nivel mínimo que derivo en racionamiento y paralización de máquinas de generación de la planta. Los cortes de electricidad tocaron un máximo histórico de hasta 10 horas, aunque el plan de administración de cargas ordenaba cuatro horas.
Aguilar acusa que ahora se hace un derroche de agua, en un escenario de importación de diésel y combustible para las plantas térmicas, mientras la hidroeléctrica pierde la materia prima para la generación sin estar frente a una crecida milenaria. “Esos megavatios que se podían producir los necesitan el Zulia que tiene baja histórica” en demanda y oferta por la contracción económica y la inestabilidad del SEN.
A partir de hoy, son ocho meses sin información del comportamiento del Sistema Eléctrico Nacional. “Este Gobierno mantiene opacidad en los datos. Es una irresponsabilidad”, criticó resaltando que hacia Carabobo las plantas térmicas surtidoras del centro del país, hay una inestabilidad. Planta Centro y Termocarabobo tienen instalados tres mil 372 megavatios y “apenas hay disponible 350 MW”.
Sin información
Hoy, lunes, ya son ocho meses sin información del comportamiento del Sistema Eléctrico Nacional. “Este Gobierno mantiene opacidad en los datos. Es una irresponsabilidad”, criticó José Aguilar, ingeniero eléctrico y experto internacional energético, resaltando que hacia Carabobo las plantas térmicas, surtidoras del centro del país, hay una inestabilidad. Planta Centro y Termocarabobo tienen instalados tres mil 372 megavatios y “apenas hay disponible 350 MW”.
diciembre 7, 2024
