Vecinos de la invasión 18 de Enero, en el kilómetro 14 vía La Concepción avistaron el cuerpo de José Rumuardo Colina Zambrano, de 38 años. Presentaba signos de tortura
Vecinos de la invasión 18 de Enero, en el kilómetro 14 vía La Concepción avistaron el cuerpo de José Rumuardo Colina Zambrano, de 38 años. Presentaba signos de tortura, heridas por arma blanca y degollamiento. Los cercanos presumen que lo hayan matado para robarlo.
La calle 95K de la parroquia San Isidro, divide la invasión del sector La Bendición de Dios III. Un transeúnte caminaba por el lugar y a las 6.00 de la mañana de ayer avistó el cuerpo de Colina, que estaba boca arriba, semidesnudo, hinchado y descompuesto sobre su propia sangre. Los testigos explicaron que el vecino buscó a los cercanos para identificar a la víctima. Tras lograrlo llamaron por teléfono a Yakelin Mejías, su esposa. La pareja dijo desconsolada que su acompañante se dedicaba a vender verduras y frutas en el centro de Maracaibo.
"Trabajaba mucho para comprarse lo que quería". Yakelin explicó que reunía para comprarse ropa de buena calidad y que es por eso que lo dejaron sin vestimenta. Una patrulla de Polisur resguardó la escena del crimen, los oficiales presumen que haya sido víctima de un robo, puesto que todos lo que lo conocían explicaron que el cruzaba la calle para agarrar transporte público para ir a trabajar, pues la invasión no era un camino que debiera atravesar. El cuerpo estaba bajo una lata de zinc a 35 metros de la arteria vial.
Mejías dio a conocer que desde el pasado domingo no lo había visto, ya que ella estaba viviendo en casa de un pariente que sufrió un accidente de tránsito. "Nosotros hablábamos por mensajes y llamadas". Una vecina contó que la tarde del pasado viernes lo vio comprando cigarros. "Era un vecino tranquilo, no tenía vicios" refirió. Vivía en La Bendición de Dios III con su esposa y dos hijos.