Álvaro Soto, vicepresidente Apuz informó que la Federación de Asociaciones de Profesores Universitarios de Venezuela (Fapuv) se mantiene en la mesa para la discusión de las cláusulas que estaban diferidas
El inicio de clases previsto para septiembre se mantiene en jaque. La Asociación de Profesores Universitarios de la Universidad del Zulia (Apuz) esperarán hasta el 21 de septiembre para realizar una asamblea extraordinaria donde formalizarán la suspensión de actividades académicas, esperan que en ese lapso de tiempo el Gobierno reconsidere la propuesta presentada.
Álvaro Soto, vicepresidente Apuz informó que la Federación de Asociaciones de Profesores Universitarios de Venezuela (Fapuv) se mantiene en la mesa para la discusión de las cláusulas que estaban diferidas.
Manifestó que la asamblea para definir el inicio de clases lo harán días previos al comienzo de las actividades para evitar que las decisiones sean impugnadas.
“A nosotros nos toca reincorporarnos el 21 de septiembre si convocamos la asamblea antes nos pueden impugnar cualquier decisión que se tome por estar en el período vacacional y que por ley se debe respetar el goce y disfrute de las vacaciones además, cualquiera puede decir que está de acuerdo con no reincorporarse pero no le permitieron manifestarse y opinar porque estaba en vacaciones y por ende invalidar las decisiones”.
Aclaró que aún sigue en pie la no reincorporación de clases, destacó que se está exhortando al Ejecutivo a que se siente a discutir lo correspondiente a los derechos adquiridos por los profesores y que se están violando en la propuesta correspondiente a la cláusula 83. Agregó que no se puede aceptar nada que signifique “comida para hoy hambre para mañana”.
“Cuando se acerquen el 21 se hará la asamblea para la no reincorporación eso, mientras se espera a ver si pasa algo nuevo que satisfaga los intereses del profesorado, lo que menos se quiere es mantener e incrementar un conflicto pero tampoco se trata de sacrificar los derechos adquiridos porque esa propuesta significa comida para hoy hambre para mañana, porque lo que aceptaron los empleados es que el próximo aumento sería del 20 por ciento en septiembre de 2016 y la inflación este año debe cerrar en tres cifras, es decir; que no han pagado el aumento cuando ya no alcanza para nada”.