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“No nos vamos a dejar quitar el control de la calle”, recalcó el vicepresidente Aristóbulo Istúriz, ante la Toma de Venezuela que realizará mañana la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en todas las capitales del país, con lo que el oficialismo intentará medir fuerzas en una concentración que realizarán hoy para recibir al presidente Nicolás Maduro luego de su “viaje relámpago” por varios países productores de petróleo.
Desde Maracaibo y acompañado por 12 ministros del Ejecutivo para iniciar la nueva etapa de gobierno de eficiencia en la calle, Istúriz aseguró que el oficialismo posee una mayor capacidad de movilización y aclaró que demostrarán la “contundente fuerza” que tienen.
Dudó que la MUD presione desde las calles para que se dé la salida electoral del Presidente de la República. “Es lógico que si a Maduro le piden la renuncia, él se niegue, porque fue electo por voluntad popular y nadie que sea elegido por el pueblo va a renunciar a esa responsabilidad”.
En rueda de prensa desde la Residencia Oficial y en la que también estuvo el gobernador Francisco Arias Cárdenas, el vicepresidente habló sobre el inicio del diálogo que se dará el 30 de octubre. “Nuestra bandera es la paz. Siempre hemos estado dispuestos a sentarnos a dialogar”.
Señaló que la oposición “está desesperada”, porque no le “pueden responder a su gente sobre el fraude que hicieron con el referendo revocatorio, el cual siempre dijimos que no se haría porque los tiempos no daban”.