A Yhonata Contreras (33), lo mataron de un tiro en el rostro. La Policía científica investiga su círculo social y sus enemigos. Tenía antecedentes. Su familia dijo que era taxista
Maleantes sorprendieron a Yhonata Alberto Contreras Pérez, de 33 años, técnico de refrigeración y actualmente, según su esposa, taxista, y lo asesinaron de un balazo en la cabeza al salir de una tasca clandestina en la calle 80 con avenida 3D del sector Valle Frío en la parroquia Santa Lucía. Estuvo en el pabellón B del retén El Marite, por robo agravado de vehículo.
A la 1.00 de la madrugada de ayer le dispararon a Contreras, frente a la taguara, en la vivienda Charo N°79A-23, a dos cuadras de su casa N° 2B-239 en la calle 80. Los vecinos explicaron que escucharon un tiro pero no salieron. Entre los presentes socorrieron a la víctima y la llevaron hasta el Hospital Central pero ingresó sin signos vitales. La bala le ingresó por el rostro y bajó hasta el cuello.
En los alrededores del centro de salud, habló su esposa Andrea Ávila. Explicó que su pareja trabajaba como taxista con el carro de ella. “Tenía dos años trabajando en la línea Taxi Celular”. Ávila recordó que su esposo salió de su casa caminando la tarde del pasado viernes, en la madrugada del sábado lo mataron, no le robaron nada.
La Policía científica hizo el levantamiento planimétrico del hecho frente a la tasca, trasladaron el cadáver hasta la morgue y dieron inicio a las investigaciones correspondientes. Se conoció que a Yhonata lo detuvo la Guardia nacional en el sector Puerto Caballo, vía a El Moján a bordo de una camioneta Toyota, modelo 4Runner gris robada en compañía de un compinche el 18 de diciembre de 2007, según la causa N°-1C-5479-07, decisión 121-08 del 31 de enero de 2008, emanada por el Juzgado Primero de Primera Instancia del Tribunal Supremo de Justicia, donde acusan a Yhonata y a su aliado por el delito de robo agravado de vehículo automotor y porte ilícito de arma de fuego. El 14 de agosto de 2009 lo condenaron a purgar 10 años de prisión. Pero salió en libertad por Plan Cayapa. Los detectives manejan como móvil del hecho la venganza. Yhonata dejó cuatro hijos y era el mayor de tres hermanos.