
Pese
Un Barcelona aún en construcción recuperó parte de su autoestima con una fácil victoria (2-0) ante el Betis, que pudo llevarse una goleada mucho mayor, si su guardameta Adán y los postes no se hubieran interpuesto en el camino de un gran Lionel Messi.
Tras la pobre imagen ofrecida en la Supercopa de España, los de Ernesto Valverde le debían un buen partido al Camp Nou. También a la golpeada ciudad de Barcelona y a esos 56.000 valientes que se acercaron al estadio para gritar “no tinc por” (no tengo miedo), tras los atentados terroristas del jueves pasado.
Y en medio de esa atmósfera cargada de emotividad, de un escenario envuelto en un ambiente irremediablemente extraño, saltó el Barcelona al terreno de juego, dispuesto a buscar el partido desde el primer minuto, presionando más arriba que nunca, ahogando a un Betis incapaz de cruzar al campo rival con el balón controlado.
Ambos goles llegaron en el primer tiempo. El primero en el 36’ en propia puerta de Tosca y el segundo anotado por Sergi Roberto dos minutos después.
Pese a la gran cantidad de intentos que tuvo el club catalán en la segunda mitad, en especial Messi que pegó un balón al palo, el marcado no se movió y los de Valverde consiguieron su primera victoria de la temporada.
“Hemos dominado el juego, nos ha costado generar más ocasiones desde el inicio y en el segundo tiempo el ritmo ha bajado un poco como producto del resultado”, dijo el entrenador del Barca.
Asimismo, Valverde se refirió a las víctimas del atentado, afirmando que “hoy era un día especial, empezábamos la Liga y sabemos la transcendencia de lo sucedido en Barcelona y en Cambrils. Nuestra idea es continuar adelante y queríamos hacer un homenaje a nuestro modo a todas las víctimas”.
El próximo encuentro de los azulgranas será el sábado 26 de agosto ante el Alavés del venezolano Christian Santos.