Con Luis Suárez y Andrés Iniesta en la banca pero Lionel Messi y Neymar nuevamente goleando, el Barcelona se deshace con facilidad del Levante al vencerlo por 4-1 y se mantiene en liderato de la liga española
Con Luis Suárez y Andrés Iniesta en la banca pero Lionel Messi y Neymar nuevamente goleando, el Barcelona se deshizo con facilidad del Levante el domingo, al que derrotó por 4-1 de local para mantenerse líder de la liga española al cierre de la cuarta fecha. El astro argentino marcó un penal y falló otro, pero calmó su sed con un segundo tanto de bella factura.
Como hace una semana ante el Atlético de Madrid, Messi y Neymar vieron portería y completaron un triunfo que empezó a tomar forma con el tanto del central Marc Bartra a los 50 minutos. Messi subió el tercero en una primera pena máxima que convirtió a los 61 minutos, después de que Neymar (56) hubiera puesto el segundo y el Levante recortara por vía de Víctor Cadesús (66). "La Pulga" añadiría la cereza final en el último minuto, con una eléctrica carrera y enrabietada definición marca de la casa.
"Fallar penales no hace más humano a Messi, porque luego mete dos goles y da una asistencia. De humano tiene muy poco", consideró el técnico azulgrana Luis Enrique, quien justificó su política de rotaciones. "En 22 días jugamos siete partidos y los jugadores necesitan descanso para afrontar con máximas exigencias los choques decisivos. Seguimos en la buena línea del inicio".
El Barsa continúa perfecto con 12 puntos de 12 posibles y retomó la punta que había ocupado transitoriamente el escolta Real Madrid, con 10 unidades, tras vencer 1-0 al Granada el sábado.
Con vistas al cargado calendario y la quinta fecha a disputarse entre semana, Luis Enrique, reservó de inicio a titulares habituales como Iniesta y Suárez, dio entrada a los canteranos Munir El Haddadi y Sandro Ramírez, y retrasó a Messi al mediocampo, desde donde el argentino racionó sus carreras e intentó lanzar al equipo con pases largos y precisos, incorporándose habitualmente a posiciones de remate.
El experimento funcionó a medias durante el primer tiempo, en que los azulgranas contaron las mejores ocasiones, aunque sin dar sensación de amplia superioridad ante un Levante que se estiraba y reculaba conforme el balón circulaba de un lado a otro, satisfecho de inquietar con contragolpes puntuales de Nabil Ghilas, quien falló un franco remate frente a Marc-André ter Stegen.
El Barsa lo intentó, casi siempre con Messi de protagonista, pues fue el argentino quien obligó a la primera atajada de Rubén Martínez, luego probó de tiro libre directo y más tarde habilitó a Neymar por la izquierda, en disparo fallido del brasileño en carrera.
Munir disfrutó del mano a mano más claro tras una cabalgada por la derecha, pero pecó de individualista y estrelló su punterazo en el arquero, antes de que Messi retomara el mando con un latigazo que Martínez repelió con apuros, y un poderoso cabezazo llegando desde atrás, alto por poco.
El plan defensivo le valió al Levante durante poco menos que una hora. Lo que tardó Messi en poner la pausa en el área tras una jugada atropellada y levantar un globo con el exterior de la zurda para Bartra, hábil finalizador con amortiguación de pecho y remate raudo y bajo, entre Martínez y el primer poste.
El segundo tanto lo empujó Neymar desde el mismo lugar y con su habitual descaro, colocando entre las piernas del defensor su segundo derechazo tras centro de Dani Alves y mal despeje del portero.
Abierta la herida, el Barsa hundió el dedo con un penal provocado por el brasileño y convertido por Messi, frío definidor desde los 11 metros con un zurdazo autoritario.
El viento soplaba a favor del conjunto local, pero Ter Stegen pifió una salida en tiro de esquina y permitió que Casedesús aprovechara el regalo en boca de gol.
Recortado el marcador, el Levante se lanzó a la aventura con presión alta, pero hubiera firmado no encajar más goles después de que Messi lanzara por encima del travesaño la segunda pena máxima de que dispuso, tras ser derribado por Zouhair Feddal.
Enrabietada, "La Pulga" se dispuso a enmendar su error, y lo hizo de sobra con un bello tanto en que condujo la pelota en diagonal hasta el balcón del área, sorteando cuantos rivales se interpusieron en su camino antes de soltar un zurdazo inapelable junto a la base del poste, bueno para su tercer tanto del torneo.
En partidos anteriores, el Celta de Vigo ganó 2-1 en cancha del Sevilla y el Villarreal también derrotó de local por 3-1 al Athletic de Bilbao para que ambos equipos alcanzaran al Madrid en la clasificación.
La jornada también ofreció la victoria del Sporting de Gijón por 3-2 en cancha del Deportivo La Coruña y del Rayo Vallecano, 1-0 en visita al Las Palmas.