Michy
Los blues regresan al trono. El Chelsea FC es campeón de la Premier League, a una jornada de terminar la temporada, luego de imponerse, con sufrimiento, 0-1 ante el West Bromwich Albion, de Salomón Rondón, en el estadio de The Hawthorns. Un gol del delantero belga Michy Batshuayi le dio el triunfo al elenco londinense, quinto consecutivo y vigesimoctavo en la temporada.
“No hemos tenido suerte, hemos hecho un gran trabajo durante todo el año. Y ahora lo importante es descansar, ya que todavía podemos ganar la FA Cup (la final es el 27 de este mes ante el Arsenal)”, manifestó el entrenador del conjunto visitante, Antonio Conte, que igualó al portugués José Mourinho, su compatriota Carlo Ancelotti y al chileno Manuel Pellegrini al ser campeón de la Premier League en su primer año en Inglaterra. “Esta es una gran hazaña para los jugadores. Y les tengo que dar las gracias por su compromiso y por su ética de trabajo. Han demostrado una actitud magnífica; todos debemos estar felices de lo que hemos logrado”, indicó Conte.
Sin aciertos frente al arco
Los visitantes empezaron bien el compromiso, jugando en campo contrario, dominando la posesión y moviendo el balón en las inmediaciones de la puerta de Ben Foster, pero sin acertar frente al arco, mientras que el equipo local esperaba atrás y dependía de contragolpes, liderados por su punta: el delantero venezolano Salomón Rondón, que disfrutó su trigésima titularidad y jugó el encuentro completo.
El Chelsea, que fue campeón en la temporada 2014/2015, tuvo chances de abrir el marcador: primero con un disparo de Henry Cahill y poco después con un lanzamiento de César Azpilicueta, pero el guardameta rival no tuvo problemas para atajar ambos intentos. Con Moses apareció la ocasión más clara: el mediocampista nigeriano probó al guardameta de los Baggies con un disparo que lo obligó a sacar una mano salvadora. Los de Tony Pulis solo se aproximaron una vez a la meta de Thibaut Courtois, por medio del ariete criollo: Rondón no supo aprovechar un fallo defensivo de David Luiz y su disparo se marchó desviado.
Sin embargo, cuando faltaban apenas ocho minutos para el pitazo final, y que se decidiera el título el próximo lunes, Michy Batshuayi, que había entrado por Pedro al 76′, se puso la capa de héroe, inesperadamente, y mandó al fondo de la red un pase de Azpilicueta, poniendo el 1-0 para que, in extremis, el elenco blues consiguió su quinto título de liga. “Vi que (Edén) Hazard y Pedro estaban cansados y que necesitábamos algo más de energía. ¡Michy me ha salvado con ese cambio! Fue genial”, recordó el técnico campeón.
Conte, que llegó al conjunto londinense el pasado verano procedente del banquillo de la selección de Italia, además expresó que para él “no fue sencillo llegar a Inglaterra y tener que acostumbrarme a los hábitos de aquí, al idioma y a la herencia de unos futbolistas que llegaban tras una mala temporada. Pero todo salió bien y estoy encantado”. Ya con el título matemáticamente en sus manos, el Chelsea aún debe asumir dos encuentros “de trámite”: el próximo lunes 15, ante el Watford, y el domingo 21, ante el Sunderland.