Las bombas lacrimógenas, gas pimientas y los perdigones hicieron correr a los ciudadanos hacia las residencias de la zona. La actividad de calle arrancó a las 11.00 de la mañana desde la prolongación 2, recorrió la avenida Paúl Moreno Camacho hasta la sede de la Oficina Regional Electoral
Día 90 de la resistencia civil. En Maracaibo la oposición continuó ayer las manifestaciones pacíficas en contra del gobierno de Nicolás de Maduro y su propuesta de Asamblea Nacional Constituyente (ANC). Partidos políticos y miembros de la sociedad civil marcharon por toda la avenida Paúl Moreno Camacho hasta la sede de la Oficina Regional Electoral (ORE), ubicada en la Guarnición de Maracaibo, conocida como La Barraca.
La represión nuevamente fue el desenlace de esta acción de calle. Los manifestantes al llegar al Consejo Nacional Electoral (CNE) fueron reprimidos por el grupo antimotín de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) que custodiaba las instalaciones del órgano comicial.
La respuesta fueron piedras y botellas por parte de un grupo de encapuchados que se encontraban en la protesta. Las bombas lacrimógenas, gas pimientas y los perdigones hicieron correr a los ciudadanos hacia las residencias de los alrededores. Una vez más los habitantes de las villas y edificios de la zona abrieron sus puertas para dar resguardo a las personas. Hubo muchos afectados a causa de los gases lacrimógenos.
La marcha arrancó desde la prolongación 2 a las 11.00 de la mañana. Cincuenta minutos después llegó a la sede del ente comicial acompañada por una leve llovizna que arreció con el transcurso de los segundos, lo que hizo que la represión solo se extendiera por 40 minutos, pues provocó que los guardias nacionales abandonaran la zona de enfrentamiento debido a que el agua disemina rápidamente los gases lacrimógenos y estos pierden su efecto.
Frases como "Maduro, vete, no te queremos" y "la constituyente no va", fueron algunas de las consignas que los ciudadanos gritaron durante la marcha en la que destacó la bandera tricolor como siempre sucede desde principios de abril que comenzaron las protestas contra el gobierno de Nicolás Maduro.
Repudio a la violencia
El diputado Juan Pablo Guanipa, coordinador regional de Primero Justicia (PJ), recalcó que la protesta es legítima sobre todo en un país que está signado por la deficiencia, la corrupción y por la crisis institucional con la que "el Gobierno decidió ser una dictadura".
El dirigente político llamó a la ciudadanía a seguir los parámetros de las convocatorias de la oposición al hacer referencia al fallecido y los varios heridos que resultaron el miércoles después del trancazo. "Si el llamado es a trancar hasta las cuatro, hay que mantenerlo y respetarlo, porque hace que la protesta no se nos vaya de las manos".
Guanipa repudió la violencia que "se quiere infiltrar y acabar con la manifestación pacífica".
El concejal Eduardo Vale, coordinador municipal de Voluntad Popular (VP) en Maracaibo, exigió que las personas que incurran en hechos de delincuencia sean rápidamente retenidas, porque resaltó que lamentablemente dañan la protesta pacífica y no violenta que afirmó está llevando a cabo desde la Unidad Democrática.