
Ninguno
Desde muy temprano funcionarios adscritos al Cuerpo de Bomberos en Lagunillas paralizaron sus labores y se apostaron frente a la sede con pancartas en mano para exigir un aumento en salario y de cestatique. Los hombres facultados para salvar vidas se preguntan quién come con un salario de 40 mil bolívares mensuales y 63 mil en la tarjeta de alimentación.
Ninguno de los manifestantes se atrevió a identificarse por temor a represalias. Sin embargo, trascendió que les levantaron un acta a los 40 hombres de azules activos quienes decidieron hacer eco de las irregularidades que los afecta.
En medio de la protesta pacífica que llamó la atención a los transeúntes de la calle principal Córdova, hicieron un llamado a las autoridades regionales y municipales sobre la situación de las cuatro ambulancias, las dos unidades de logística y las 12 unidades tipo motos fuera de servicio, esto último provocó el cierre de la brigada motorizada que prestaba atención primaria a las comunidades. Las 20 personas que la conformaban pidieron la baja y siguen a la espera del pago de las prestaciones sociales.
Trascendió que las irregularidades se extienden a las dos subestaciones bomberiles de Lagunillas. La ubicada en el barrio Libertad la cerraron por falta de personal y equipos, mientras que la del sector El Danto no hay unidades disponibles, solo un funcionario que labora por 24 horas continuas con la disposición de radio portátil y teléfono, su capacidad operativa es a medias.
Se conoció que Mervin Méndez, alcalde del municipio Lagunillas, ofreció hacer los reajustes salariales exigidos por los funcionarios. “Seguimos de brazos caídos. La decadencia en el cuartel bomberil es evidente y afecta a la población que requiera nuestro apoyo. Ojalá que los gobernantes se apiaden y busquen rápidas soluciones, acordes a las necesidades”, dijo uno de los protestantes.