Un punto grave para el Gobierno es la asunción de Duque en Colombia. Él ha demostrado tener la animadversión necesaria contra el gobierno de Chávez-Maduro
Y estalló… no nos referimos a drones, bombonas de gas, ni a nada parecido. Hacemos mención a la calle, al pueblo llano en su mejor expresión, sin partidos. No haremos referencia a lo ocurrido en el desfile conmemorativo del aniversario de la GN por dos razones; la primera es que no somos expertos en explosivos, armamentos, ni nada a fin. En segundo lugar, porque en Venezuela el flujo informativo está sesgado, autocensurado, carece de credibilidad. Sea lo haya ocurrido nadie gana, desfavorece a nuestra Venezuela, el riesgo país continúa elevándose. ¿Quién se atreve a invertir en este oscurantismo?
¡Boooom!, estalló el país, un big bang cuya onda expansiva se disemina a lo largo y ancho de toda la geografía nacional. Las enfermeras, los transportistas, los agricultores, las comunidades, en fin, eso que mientan “pueblo” está comenzando (tardíamente) a exigir soluciones, el dato importante es que no cree en nadie, no hay líder opositor con la fuerza suficiente para amalgamarlo a su favor, mucho menos un gobierno desacreditado e incapaz, que solo sabe empeorar lo que parece no poder seguir empeorando.
Dentro de las lecturas posibles, lo que es bueno para uno es malo para el otro, al Gobierno lo salva que el irreversible descontento del que es dueño no es capitalizado por la oposición orgánica, sin embargo, a la oposición le beneficia que dicho tsunami de descontento ha hecho que los venezolanos hayan perdido el miedo al régimen, la realidad país se antepone a cualquier temor o manipulación, ello está demostrado en la anémicas participaciones en los pasados “procesos electorales” (constituyente y demás), en las desnutridas marchas del Gobierno, en el incremento progresivo de las protestas y manifestaciones. Tan es así, que dentro de las filas del chavismo día a día las deserciones se van sumando.
Un punto grave para el Gobierno es la asunción de Duque en Colombia. Él ha demostrado tener la animadversión necesaria contra el gobierno de Chávez-Maduro, que careció Santos e incluso el mismo Uribe, sin lugar a dudas, el nuevo presidente neogranadino avivará las presiones internacionales contra Maduro y su régimen, es un escenario cantado.
El Gobierno se sabe contra las cuerdas dentro y fuera de nuestras fronteras, arreciará contra la oposición, contra la libertad de prensa, de opinión, de expresión, contra todo aquello que narre, cuente o describa la realidad, intentará desviar la atención de los problemas sentidos del país aunque será inútil, el presunto atentado con drones en otra época le hubiese dado material suficiente para un mes, apenas 72 horas de lo ocurrido está olvidado porque el venezolano está ocupado/preocupado por su sustento personal/familiar en medio de una hiperinflación, escasez y caos generalizado que se agrava con el pasar de las horas.
¡Boooom!, finalmente estalló el país, el fracaso del socialismo del Siglo XXI es tan dramático y contundente que se autodestruyó, ni siquiera dejó para financiarse, estamos en la oscuridad más profunda de estos luengos 19 años de oscurantismo, pero recuerden, los países no tocan fondo, pueden continuar empeorando infinitamente, solo depende de los venezolanos detener y revertir todo este daño… la manera correcta comenzó, ¡la presión social!