A Emilia Lugo la describieron como una joven agradable, muy querida y popular en su barriada, pero desde que la mataron, el pasado lunes en la madrugada en Cañada Honda, muchos se mantiene al margen
A la despedida de Emilia Carolina Lugo García (20) solo asistieron una veintena de amigos. Sus familiares la describieron como una joven agradable, muy querida y popular en su barriada, pero desde que la mataron, el pasado lunes en la madrugada en Cañada Honda, muchos se mantiene al margen. Hasta ahora el único sospechoso es el "Cachaco".
Sus vecinas, en su mayoría adolescentes, se escribieron en el antebrazo con marcador azul "Emilia QEPD". Se sentaron frente a las capillas velatorias San Juan de Dios de Maracaibo y no se movieron hasta que la carroza fúnebre partió a las 11.00 de la mañana para el Cementerio Corazón de Jesús.
La Policía científica investiga el caso como una riña. Hasta ahora solo vinculan al "Cachaco", un amigo de la muchacha. Creen que la acompañó a una fiesta el pasado domingo y horas después encontraron su cadáver en la calle.
“Ella era muy fiestera, siempre salía los fines de semana pero no sabemos si tenía novio o estaba con alguien en ese momento. Era muy discreta con sus cosas”, comentó Jeimary Bravo, amiga de Lugo.