Mañana los fieles católicos tienen otra cita en la iglesia catedral, en el casco central de Cabimas y es que la Virgen Nuestra del Rosario, patrona de ese humilde pueblo, celebra su día. Ayer viernes, las mañanitas y el repique de campanas adornado con los fuegos artificiales fueron el abreboca para la celebración católica
La primera eucaristía será a las 7.00 de la mañana y la oficiará el padre Jorge Pérez Duno, párroco de la iglesia central de la ciudad en la que unos niños realizaran el sacramento de la primera comunión.
Otras tres eucarísticas esperan concentrar a los devotos de la virgen. A las 10.00 de la mañana será la misa que ofrenda la Alcaldía de Cabimas, a las 12.00 del mediodía será la siguiente donde realizaran varias santificaciones de hogar y la última será la solemne eucaristía oficiada por Rafael Caldera a las 5.00 de la tarde, una vez culminada la imagen de la virgen, en los hombros de los Servidores de María saldrá en procesión por las calles El Rosario, Carnevalli, Sucre, Mercedes y Miranda para retornar a la iglesia Catedral que lleva el nombre de la patrona.
Cuenta la historia que la imagen venerada apareció en un barco abandonado a las orillas del Lago de Maracaibo y fue merecedora de cultos en una pequeña ermita de palmas de coco, justo en el espacio donde funge la plaza Bolívar. El 26 de julio de 1990 fue coronada como reina y madre de la Costa Oriental del Lago por el papa Juan Pablo II y monseñor Oriano Quillici.
María del Pilar Zambrano, devota de la virgen, asegura que todos los años asiste a la iglesia para recibir la bendición de la patrona. “Es un día para celebrar y agradecer por la misericordia y protección derramada en la familia. Mientras tenga vida asistiré cada siete de octubre”.